Adicionalmente, Vidrala conservará la propiedad de todo el producto terminado fabricado en la planta hasta la fecha de cierre, así como de algunos otros elementos productivos, como moldes utilizables en otras plantas del Grupo. La transacción también incluye la formalización de un acuerdo de suministro en virtud del cual Vidrala adquirirá parte de la producción de la referida planta belga, durante un período de cinco años, garantizando de esta forma el servicio al cliente a medida que se desarrolla el plan inversor para el reemplazo de capacidades productivas actualmente en marcha dentro del Grupo.
El impacto final de la transacción en el resultado consolidado de Vidrala se detallará en los estados financieros correspondientes al ejercicio 2019. De manera preliminar, se estima que la transacción genere una pérdida no operativa por enajenación de activos de aproximadamente 5 millones de euros.