Santander | La magia del mercado de crédito. Entre los factores que vuelven a pesar están unos all-in yields mucho más atractivos ahora, sobre todo para los fondos de pensiones y aseguradoras que se perdieron el rally de final de año, y una expectativa de que el agudo ajuste en rates podría estar ya llegando a su fin (Dec 24 Fed Funds ya a niveles > pre-dovish FOMC de diciembre). Nuestros estrategas de rates ven el Bund 5/10Y en el 2,12/2,21% YE – desde c2,3% actual).
En este contexto, es fácil entender las bondades de tomar riesgo de duración, incluso con curvas de crédito demasiado planas (o hasta ligeramente invertidas). Además, el spread de crédito explica un 24% del all-in yield, lógicamente muy por debajo de los años de QE, pero por encima de la media previa de 2000-08 (19%). En este entorno, y sobre todo tras cerca de una década de represión financiera, comienza a aflorar dinero antes depositado en vehículos mucho menos líquidos (o en equities) hacia €IG, activo que disfruta de volatilidades hundidas en este ciclo (sobre todo vs MOVE) y de all-in yields, no sólo en zona de máximos desde 2012, también en niveles que superan ahora al yield del dividendo.
Las entradas en los fondos, aunque se han ralentizado en febrero al son de unos retornos totales YTD negativos en la beta baja tras el movimiento de rates, mantienen su fortaleza en el mundo HY. Y la demanda de crédito se extiende hacia CLOs, sobre todo por parte de los bancos en EEUU y al son de una recuperación de la base de depósitos post SVB. Después de todo, en un entorno de limitado crecimiento del préstamo corporativo (encuestas SLOOS de la Fed y BLS del BCE), no es ninguna sorpresa que también se haya producido un salto en los holdings de securities (en la banca de EEUU desde los mínimos de c$5trn de octubre a $5,14trn a finales de enero). Y MBS aparte, CLOs AAA también parecen haber formado parte del acopio del sector financiero, según datos de la Fed recopilados por Bloomberg.