Tres posibles fuentes de ingresos en la renta variable: dividendos, recompra de acciones y una estrategia de opciones call

Álvaro Cabeza (UBS AM)

Álvaro Cabeza (UBS AM) | Para aquellos que buscan ingresos, la vida se ha convertido en un reto de inversión. A medida que las rentabilidades de los bonos de calidad descienden, ¿se postula una estrategia defensiva de dividendos como una alternativa para obtener ingresos atractivos?

En un contexto de bajos tipos de interés y años de compras de activos por parte de los bancos centrales que ha llevado a rendimientos de bonos ultra-bajos, muchos inversores en busca de ingresos han trasladado su atención a las acciones donde la rentabilidad por dividendos se ha mantenido, en general, en sus niveles históricos de 2% a 4%.

Si bien las acciones ofrecen el potencial de aprovechar la subida del mercado, también es cierto que el riesgo de perder capital es superior a lo que un inversor típico en bonos de alta calidad estaría dispuesto a aceptar. Sin embargo, hay tres posibles fuentes de ingresos en la renta variable: dividendos, recompra de acciones, y una estrategia de opciones call, y nosotros evaluamos su lugar en las cateras de renta variable.

Las herramientas del inversor en ingresos

En los años posteriores a la crisis financiera mundial, muchas empresas se desapalancaron y reforzaron sus balances acumulando importantes reservas de efectivo. La crisis de la COVID-19 llevó a algunas de esas empresas, sobre todo a varios bancos británicos cotizados, a recortar o incluso cancelar sus dividendos. Sin embargo, muchas empresas han mantenido sus dividendos intactos, y las rentabilidades se mantuvieron bien cuando los mercados cayeron. A medida que los mercados se recuperaron con fuerza, las rentabilidades también bajaron un poco.

Para identificar las acciones con dividendos sostenibles, favorecemos una combinación de criterios de selección de acciones de alto dividendo y de alta calidad; este último puede medirse observando métricas como la alta rentabilidad, el bajo apalancamiento financiero, la robusta gestión corporativa y de capital humano, la estabilidad del precio y el tamaño de las acciones, entre otras. Creemos que esta combinación de criterios de dividendo y calidad puede conducir a mejores resultados a largo plazo.

Otro medio por el cual las acciones han proporcionado ingresos significativos en los últimos años ha sido a través del uso de recompras de acciones. Mediante la recompra de acciones, las empresas reducen el número de acciones en circulación, distribuyendo los beneficios en un conjunto más reducido de acciones. Esto se refleja en un aumento de beneficios por acción (BPA).

A menos que haya habido un cambio dramático (y coincidente) en los fundamentales, si el BPA sube, también debería subir el precio de la acción – si el precio de la acción no sube, el PER cae. Para preservar la valoración intrínseca de la empresa, el precio de la acción debería subir para mantener la relación precio/beneficio en línea con su nivel previo a la recompra. Este efecto se conoce también como «la rentabilidad de recompra» – el aumento de precio a largo plazo debido a la recompra de acciones.

Los volúmenes de recompra en Estados Unidos llegaron a su punto máximo antes de la corrección del mercado a raíz de la COVID-19 y, desde entonces han disminuido significativamente. Si bien es cierto que los beneficios también han caído, las empresas estadounidenses, de media, se han mostrado cautelosas y muchas han captado capital en el mercado de bonos para mejorar su posición de liquidez. Con la recuperación de la economía y de los beneficios, el saldo de efectivo acumulado se está acercando de nuevo a los niveles máximos y creemos que esto debería permitir a las empresas reanudar los programas de recompra.

Ingresos de las estrategias con opciones

Las estrategias de calls cubiertas venden sistemáticamente opciones call a corto plazo sobre los títulos en cartera. EL vendedor de la opción ingresa la prima de la opción, que se añade al resto de ingresos de la cartera, pero con la ventaja que al vender calls sobre los títulos individualmente, la sensibilidad de la cartera y, por tanto, el riesgo de caída, contribuye a un perfil de rentabilidad más suave. A cambio de este ingreso y este colchón de caída, la estrategia de opciones reducirá la captura alcista de la cartera.

La Prima de la opción call es una función de la volatilidad implícita de la cartera. Cuanto mayor sea el nivel de volatilidad implícita, mayor será la prima que se puede obtener de la venta de esta opción. Dado que los niveles de volatilidad son generalmente más altos durante los momentos de dificultades en el mercado, la venta de opciones call suele proporcionar mayores niveles de ingresos durante los turbulentos mercados bajistas.

Durante la corrección del mercado a raíz de la COVID-19, las primas de las opciones aumentaron considerablemente, lo que nos permitió lograr aproximadamente el doble de los ingresos normales y, al mismo tiempo, establecer unos precios de strike mucho más altos, por lo que la participación alcista en un rebote aumenta en consecuencia.

Por lo tanto, creemos que la renta variable ofrece a los inversores que buscan ingresos, un enfoque de inversión multifacético – dividendos, recompra de acciones y estrategias con opciones para generar ingresos. Dado que las tres fuentes son complementarias en cuanto a su comportamiento en diferentes partes del ciclo, una combinación de los tres enfoques podría resultar un medio eficaz para navegar en 2021 para lograr los ingresos que buscan los inversores.