Los analistas proyectan que la tasa del PCE general se desacelerará ligeramente, hasta el 3,4% y que la de su subyacente lo hará hasta el 3,7%

EEUU Precios

Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | Los mercados de valores europeos y estadounidenses continuaron corrigiendo ayer, con el sector tecnológico volviendo a liderar las caídas tras la publicación de los resultados de algunas grandes compañías tecnológicas estadounidenses que no fueron bien recibidos por los inversores. Pero la sesión de ayer tuvo otros importantes focos de atención además de los muchos e importantes resultados empresariales trimestrales que se dieron a conocer durante la jornada, tema éste del que hablaremos más adelante.

Así, y en primer lugar, cabe destacar que ayer, y tal y como esperábamos, el Consejo de Gobierno del BCE optó por mantener sus tres tasas de interés de referencia sin cambios, en una reunión en la que, finalmente, y según confirmó la presidenta de la institución en rueda de prensa, la francesa Christine Lagarde, no se habló de la posibilidad de acelerar el proceso de reducción del balance del BCE ni de la remuneración de los depósitos de los bancos en el banco central, temas ambos que habían mantenido muy tensionados en los últimos días a los bonos soberanos, especialmente a los italianos, y que también habían lastrado las cotizaciones de los bancos de la región en bolsa. Si bien Lagarde volvió a “amenazar” con nuevas subidas al afirmar que el detener el proceso de alzas de tipos no implicaba que no los pudieran aumentar de nuevo, señalar que, y siempre según nuestra opinión, el retroceso experimentado por la inflación en los últimos meses en la Eurozona, la debilidad generalizada de las economías de la región y la fuerte caída de la demanda y oferta de crédito, hacen poco probable, salvo repunte inesperado de los precios, que el BCE vuelva a incrementar sus tipos. De hacerlo podría provocar una fuerte recesión en la Eurozona, siendo peor el remedio que la enfermedad. Por último, y en lo que hace referencia a la disciplina fiscal solicitada por Lagarde a los Gobiernos de la Eurozona durante su intervención, decir que, si bien estamos totalmente de acuerdo con su petición, de momento, y hasta que las cosas no se pongan “realmente feas”, como suele ocurrir, caerá en “saco roto” ya que la mayoría de estos Ejecutivos utilizan la política fiscal para obtener réditos políticos más que en beneficio de sus economías.

En un principio, la reacción de los mercados de bonos y de acciones a lo “hecho y dicho” por el BCE y por su presidenta fue positivo, con los primeros girándose al alza, lo que permitió la caída de sus rendimientos, y los segundos con sus principales índices recuperando algo del terreno perdido durante la mañana, con algunos de ellos llegando, incluso, a ponerse en positivo por momentos aunque, posteriormente, la debilidad de Wall Street les volvió a arrastrar a la baja, cerrando en su mayoría con sensibles descensos.

En Wall Street la atención de los inversores siguió centrada en los resultados empresariales, que siguen siendo muy positivos, aunque los inversores parece que están optando en muchos de los casos por ver únicamente la parte menos buena de los mismos, penalizando con dureza a muchas compañías que están presentando unas cifras que en otro “momento” de mercado serían muy bien acogidas. Ayer, incluso, la confirmación de que la economía de Estados Unidos cerró el 3T2023 creciendo muy por encima de su tendencia a largo plazo y la caída de los rendimientos de los bonos, que habían repuntado con fuerza durante la sesión precedente, no sirvió para animar a los inversores en este mercado, que volvieron a castigar con dureza a los valores de crecimiento, especialmente a las grandes compañías tecnológicas, cuyas valoraciones han subido con mucha fuerza este año, siendo la principal razón del buen comportamiento en lo que va de ejercicio del S&P 500 y del Nasdaq Composite.

No obstante, ayer, y ya con Wall Street cerrado, otro gigante del sector tecnológico, Amazon (AMZN-US) dio a conocer unas magníficas cifras trimestrales que, en esta ocasión, y a pesar de que el negocio de la nube del grupo no creció tanto como se esperaba, fueron muy bien acogidas por los inversores, propulsando sus acciones más de un 5% al alza en operaciones fuera de hora.

Igualmente, las cifras de Intel (INTC-US) y, sobre todo, sus optimistas expectativas de negocio, impulsaron sus acciones más de un 7% en operaciones realizadas tras el cierre del mercado. Todo ello, junto con el elevado nivel de sobreventa de muchos valores, se está reflejando esta madrugada en el repunte de los futuros de los índices estadounidenses, que vienen todos ellos al alza.

Este hecho y el cierre positivo de los mercados de valores asiáticos, tras varios días de descensos, creemos que permitirá que las bolsas europeas abran hoy con ganancias, intentado sus principales índices revertir parte de las pérdidas acumuladas en lo que va de mes. Por lo demás, comentar que durante la jornada continuará el reguero de compañías publicando sus cifras trimestrales, entre las que destacaríamos en la bolsa española los de CaixaBank (CABK), que han superado en conjunto lo esperado por los analistas, los de IAG, los de Mapfre (MAP) y los de Tubacex (TUB).

No obstante, la principal cita de esta semana tendrá lugar esta tarde en Estados Unidos cuando, junto a las cifras de ingresos y gastos personales del mes de septiembre, el Departamento de Comercio publique el índice de precios del consumo personal, el PCE, variable de precios que es la más seguida por la Reserva Federal (Fed) y para la que se espera una ligera desaceleración de su crecimiento en términos interanuales. Así, los analistas proyectan que la tasa de crecimiento interanual del PCE general se desacelerará ligeramente, hasta el 3,4% (3,5% en agosto), y que la de su subyacente hará lo propio, hasta el 3,7% (3,9% en agosto). De cumplir o mejorar las lecturas reales estas proyecciones, creemos que tanto los mercados de bonos como los de acciones europeos y estadounidenses las recibirán muy positivamente. En sentido contrario, de ser las lecturas peores de lo esperado, volverán los recortes a ambos mercados, ya que los inversores volverán a poner “sobre la mesa” la posibilidad de que la Reserva Federal (Fed) vuelva a subir sus tipos de interés de referencia antes de finales de año. En este sentido, señalar que AYER la probabilidad que daba el mercado a que lo haga en la reunión de su Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de noviembre era prácticamente del 0% y la que otorgaba a que lo haga en la de diciembre era inferior al 20%.