Banca March | Pese a que nos adentramos en una semana cargada de datos económicos en Estados Unidos –confianza del consumidor, venta de viviendas, revisión final del PIB del 1T, entre otros–, habrá que esperar hasta el viernes para conocer las cifras del indicador de precios estrella preferido por la Reserva Federal: el deflactor del consumo personal (PCE por sus siglas en inglés). Pensamos que, aunque puedan presentarse sorpresas en este último tramo de normalización en la inflación, la tendencia a la baja permanece inalterada.
En el caso puntual del PCE, las mayores presiones vienen dadas por el lado de los servicios, principalmente los relacionados con la salud y los alquileres. En este sentido, y siguiendo los buenos datos del IPC y los precios de producción, el mercado espera un avance mensual del +0,1% frente al +0,2% previo, siendo el menor incremento del año. En términos interanuales, se prevé una caída hasta el +2,6% tanto para la general como la subyacente, por debajo del 2,7% y +2,8% previo respectivamente.