Adiós al LIBOR, el tipo de interés interbancario de Londres a 3 meses para el USD, que se fijaba, por última vez en su historia, al 5.54543%.

Ana Racionero (Intermoney) | El tremendo “sell off” de ayer, provocado, en primer lugar, por el dato de inflación superior a las previsiones de Alemania, y, después, por las buenas cifras americanas, nos llevaba a abrir la última jornada de otra trepidante semana con los bonos acusadamente a la baja y un gran aumento de las rentabilidades que las llegaba a acercar a los máximos alcanzados en marzo.

Pero antes de nuestra apertura, durante la sesión asiática, la publicación de un IPC de Tokio y una producción industrial japonesa por debajo de las estimaciones llevaba por fin al yen a probar brevemente el nivel crítico de 145 vs USD por primera vez desde noviembre, hasta que el ministro de Finanzas volvía a echarle un capote advirtiendo de que el gobierno responderá a movimientos excesivos en el mercado de divisas. En China, los PMI compuesto y no manufacturero descendían, el último de ellos, por encima de lo previsto, y el de fabricación, con un 49.0, se mantenía en niveles de contracción, mientras se esperan unos estímulos que no terminan de llegar.

Aquí en Europa seguíamos conociendo datos de inflación. Francia subía en junio del anterior -0.1% al 0.2% en versión armonizada intermensual, igualando las encuestas, y la armonizada interanual descendía del 6% previo al 5.3%, mejorando en una décima las previsiones. Estas cifras daban un balón de oxígeno a los bonos, que subían tímidamente a la espera de la inflación de la zona euro. En cuanto al conjunto de la Eurozona, éste arrojaba una estimación para el mes de junio de un 5.5% interanual, una décima mejor de lo esperado, desde el 6.1% de mayo. En términos intermensuales subía un 0.3%, tal y como reflejaban las previsiones, después de haberse estancado en mayo. Por último, la subyacente subía una décima hasta el 5.4% debido al notable aumento del coste de los servicios, mejorando igualmente en una décima las estimaciones. La tasa de desempleo permanecía invariable al 6.5%. Este retroceso de la inflación de la Eurozona hasta su nivel más bajo desde enero de 2022, antes del comienzo de la guerra de Ucrania, daba otro empujón a los bonos, haciendo retroceder sus rendimientos, a pesar de que el aumento de la subyacente añadía probabilidades a la subida de julio.

El Reino Unido daba a conocer la lectura final de su PIB del primer trimestre, que confirmaba que el crecimiento en ese periodo habría sido del 0.1% intertrimestral y del 0.2% interanual, esquivando a duras penas el estancamiento. El precio anual de la vivienda registraba su mayor caída desde 2009, alimentando la preocupación por el aumento de los costes hipotecarios.

En E.E. U.U., los ingresos personales se mantenían en mayo al 0.4%, vs 0.3% previsto, mientras que el gasto personal descendía al 0.1% vs 0.2%. El gasto personal real cedía hasta estancarse, vs 0.1%. Después venían los indicadores de inflación preferidos por la FED, el PCE deflactor, que en mayo caía al 0.1% desde el mes anterior, tal y como estaba previsto, y del anterior 4.4% interanual al 3.8%, su nivel más bajo en más de dos años, igualando también las previsiones. En cuanto al subyacente, descendía una décima desde el mes anterior hasta el 0.3% como se estimaba. Sin embargo, en términos interanuales caía una décima por encima de esperado hasta el 4.6%. Estas cifras, que muestran un enfriamiento de la economía, del gasto y de la inflación, jaleaban a las bolsas, ya que podrían evitar una segunda subida de tipos por parte de la FED a finales de año. De hecho, las probabilidades que el mercado monetario atribuía a una subida de tipos de 25 pb en la reunión de diciembre bajaban del 50% alcanzado ayer a apenas un 30%. La rentabilidad del 2 años UST y el USD retrocedían. El Nasdaq subía por encima de un 1%, lo que indica que cerrará el primer semestre con una subida récord tras sumar unos 5 billones de USD de valor en medio del paroxismo de la inteligencia artificial. En cuanto a noticias empresariales, Apple Inc. se convertía en la primera empresa de la historia en alcanzar un valor de mercado de 3 billones de USD. El WTI pasaba de los 70 USD por barril.

Posteriormente salían los PMI de Chicago, que, si bien subían al 41.5 desde el 40.4 previo, lo hacían bien por debajo del 43.8 estimado. El índice de confianza de la Universidad de Michigan era revisado al alza hasta situarlo al 64.4. El apartado de situación actual se elevaba al 69.0, el de expectativas lo hacía al 61.5 y, por último, las expectativas de inflación a un año se mantenían al 3.3% y las de 5-10 años, al 3.0%. Unas cifras que también servían de acicate a la renta variable que, al cierre de la sesión europea, acumulaban un 1.50% de subida el Nasdaq, un 1.12% el S&P y un 1.2% el Eurostoxx.

Hoy, al igual que despedimos la semana, el segundo trimestre y el primer semestre, decimos adiós, después de medio siglo, al LIBOR, el tipo de interés interbancario de Londres a 3 meses para el USD, que se fijaba, por última vez en su historia, al 5.54543%.