¿El fin de la tibieza en China?

Banca March | Las señales del Politburó (indicando una mayor proactividad fiscal) vuelven a generar la expectativa de que el Gobierno chino dejará atrás la moderación y lanzará un contundente paquete de estímulos fiscales, que hasta el momento, solo han sido medidas de segundo orden, cómo las mayores emisiones de deuda soberana para eliminar parte de la deuda local. No obstante, tras la buena acogida inicial en la renta variable China, el efecto positivo se ha ido diluyendo, especialmente cuando el propio Xi Jinping se ha referido solamente a una política monetaria más laxa en su discurso inicial. 

Se acerca el final de año y la última ventana para nuevos anuncios en 2024 será la Conferencia Central de Trabajo Económico que se celebra esta semana, en la que el Gobierno suele establecer los objetivos de cara a 2025 –incluido el de crecimiento–. Por ello, al igual que en octubre, los inversores están a la espera de una mayor concreción en las medidas, que deje atrás la simple retórica actual. No obstante, con avances en el año del +25% y del +20% para el Hang Seng y el CSI 300 respectivamente, gran parte de las buenas noticias ya están en el precio de las bolsas, lo que deja margen para la decepción en caso de mantenerse la tibieza fiscal en China.