F. Rodríguez | ESMA, el regulador y supervisor de los mercados financieros europeos, ha presentado las líneas generales de su estrategia para el periodo 2023-2028, que tendrá tres prioridades: “el fomento de la eficacia y estabilidad de los mercados comunitarios”, el “fortalecimiento de la protección del inversor retail” y la consecución de estos dos objetivos con el “refuerzo de la supervisión”. La sostenibilidad y la innovación de la tecnología y el tratamiento de los datos serán los dos “drivers clave” en el funcionamiento de la organización.
Dentro de esta estrategia, ESMA prevé implementar el denominado European Single Access Point (ESAP), un sistema  único para el acceso a la información de los productos y mercados financieros y la sostenibilidad en la eurozona, en la medida en que esta organización mantiene la “ambición de lograr una cultura supervisora común en la UE” y la “convergencia de los enfoques y resultados de la supervisión.”
Asimismo, ESMA pondrá un “foco particular en los inversores retail”, presentando “acciones relacionadas con el engagement e información y disclosure efectivos.”