Fernando Rodríguez | European Issuers, la organización europea de emisores, considera que entre sus asociaciones integrantes hay un “consenso común en que una directiva que trate sobre la gobernanza corporativa en sostenibilidad sería contraproducente”, según explica en una carta sobre este proyecto dirigida a la Comisión Europea que también suscriben otras organizaciones de inversores, empresariales, de mercados y de consejeros como Better Finance, EFB, FESE, ecoDa, SMEunited y Invest Europe.

Los firmantes consideran que “podrían apoyar” una regulación sobre `due dilligence´ de las compañías en esta área, pero que debería ser un aspecto separado de la propia directiva, proyecto que en sí mismo se considera poco oportuno.

Aunque el documento reconoce la necesidad de las compañías de atender las expectativas de los mercados y los inversores respecto a la sostenibilidad, indica, entre cosas, que “la Comisión debe evitar hacer que los miembros del consejo tengan que explicar” lo que hacen respecto a “cada uno de los intereses de sus `stakeholders´”, una tarea “no sólo imposible en sí  misma, sino que también pondría en riesgo la competitividad de las compañías europeas respecto a las de fuera de la UE”.  Introducir nuevos requisitos y obligaciones legales sobre esta cuestión, añade, “llevaría a la incertidumbre legal y al riesgo de paralizar el funcionamiento del Consejo y de la gestión”.

La hipotética implantación de un modelo único poco adaptado a las peculiaridades de cada  compañía y sector o el solapamiento de legislaciones a veces contradictorias, son otros puntos de crítica.

Los firmantes piden a la Comisión Europea que se “tome su tiempo” para un análisis más objetivo y profundo sobre esta directiva que pretendía poner en marcha para este verano.