China declara un paro juvenil del 20%

Ana Racionero (Intermoney) | Las declaraciones de Janet Yellen ante los legisladores reiterando que la capacidad de su departamento para evitar incumplir el techo de deuda mediante maniobras contables especiales podría llegar a su fin a principios del mes próximo hacía que llegáramos a la jornada de hoy en niveles máximos de ansiedad, puesto que apenas quedan un puñado de días antes de esa fecha en los que coincida que se reúna el Congreso y que Biden esté en Washington, ya que éste último saldrá mañana de viaje rumbo a Japón, Australia y Papúa Nueva Guinea, por lo que es de vital importancia llegar hoy a un acuerdo, por más que ayer McCarthy dijera que los líderes no estarían “ni cerca” de alcanzarlo. De no ser así, Biden amenaza con echar mano de la decimocuarta enmienda, en virtud de la cual, “la validez de la deuda púbica de los E.E. U.U., autorizada por ley, incluidas las deudas incurridas para el pago de pensiones y recompensas por servicios en la supresión de insurrección o rebelión, no será cuestionada”, lo que se podría interpretar como que la Constitución prohibiría al Estado el impago de sus deudas, y cuya aplicación traería consigo consecuencias ignotas, puesto que sería la primera vez que se utilizara, pero, en todo caso, lo que es seguro es que el asunto terminaría en el Tribunal Supremo.

China volvía a publicar unas cifras macro que ensombrecían aún más, si cabe, el ya de por sí sombrío ánimo, con una producción industrial que crecía en abril un 5.6%, cuando se esperaba un 10.9%, unas ventas al por menor que se elevaban un 18.4% frente al esperado 21.9%, y una inversión en propiedades que caía un 6.2% frente al 5.7% estimado, de manera que se van acumulando los datos que desmentirían poco a poco la flamante recuperación postcovid. Aunque las cifras, a priori, podrían parecer buenas, hay que tener en cuenta que se trata de la comparativa frente a un periodo en el que Shanghái se encontraba confinada. La tasa de paro juvenil se disparaba hasta alcanzar la cifra récord del 20.4%. Sus vecinos nipones, por el contrario, veían cómo su índice Topix alcanzaba su mayor nivel desde 1990.

En Europa, los Países Bajos publicaban un PIB negativo en el primer trimestre, concretamente un -0.7%, frente al incremento del 0.2% previsto en las encuestas, y sus importaciones caían un 4%. Italia mejoraba una décima en su IPC final de abril, pasando de ese modo del 8.8% al 8.7% revisado. El ZEW se precipitaba en su apartado de expectativas para Alemania del anterior 4.1 a un -10.7, frente al -5.0 esperado. En cuanto a la situación actual, si bien cedía al -34.8, la caída era menor del -37 previsto. Las expectativas para el conjunto de la Eurozona retrocedían al -9.4 desde el anterior 6.4. El PIB de la zona euro se mantenía en el primer trimestre al 0.1%, igualando las previsiones. En lectura interanual también repetía el 1.3% previo, igualando asimismo lo previsto. El empleo subía un 0.6% en el primer trimestre, desde el 0.3% del trimestre anterior, y un 1.7% desde el mismo periodo del año anterior. Stournaras, del BCE, declaraba que las subidas de tipos se hallarían cerca de su fin. En otra intensa semana de emisiones corporativas, hoy se lanzaban a emitir BNP, el brazo financiero del grupo Volvo y el Banco Europeo de Inversiones, entre otros 22 emisores, lo que da muestra de que los prestatarios continúan intentando conseguir liquidez antes del parón estival y del posible quebranto del techo de deuda.

España celebraba subasta de letras. De la 3 meses, SGLT 11/08/23, adjudicaba 402 millones de euros con un interés medio del 3.061%, y de la 9 meses, la SGLT 09/02/24, adjudicaba 1596 millones de euros con un rendimiento medio del 3.212%. En total, colocaba 1998 millones de euros de un objetivo de colocación de 1500-2500 millones de euros.

El Reino Unido publicaba unos decepcionantes datos de empleo que desataban compras de Gilts hasta dejar a su bono a dos años al 3.75% de rentabilidad.

E.E. U.U. daba a conocer unas ventas minoristas anticipadas que, en abril, ascendían al 0.4% desde el anterior -1%, aunque por debajo del 0.8% estimado. La producción industrial crecía un 0.5% vs 0.0% de las encuestas.