Alex Funk, CIO, y Tara Jameson, analista de inversión en multiactivos de Schroders | El mercado está valorando en casi un 82% la posibilidad de un recorte de un cuarto de punto para junio. Lo que hemos visto es que, en término medio, desde el momento en que la Reserva Federal empieza a recortar y según nuestros datos, la renta variable obtiene unos resultados superiores en un 11% en relación con la inflación. Eso es bastante significativo. Y la euforia puede volver al mercado.
Así pues, la renta variable no sólo ha batido a la inflación, también ha superado al efectivo en un 9% de media. En cualquier caso, tenemos que ser cautelosos porque se trata de promedios. Pero lo que es innegable es que en 16 de los 22 ciclos de recortes de los que estamos hablando, también hemos tenido una recesión, y aun así la cifra media es positiva. Así que, si la Fed puede diseñar un aterrizaje suave con este ciclo de recortes, los mercados de renta variable pueden hacerlo bastante bien.
¿Hay vida más allá del efectivo?
Según los datos de Schroders, creemos que la renta variable es un activo muy bueno para mantener en cartera a largo plazo, pero no la única alternativa.
Igualmente, dentro de la renta variable, estamos oyendo mucho a hablar de los siete magníficos: prácticamente sin deuda en el balance, fuerte flujo de caja, grandes ventajas en términos de productos y servicios, vientos de cola por su inversión en IA y en general, entusiasmo. Sin embargo, creemos que las mismas oportunidades pueden surgir en otros mercados y/o regiones por lo que creemos que es tan importante diversificar entre clases de activos como dentro de una misma clase.
No creemos que el efectivo haya muerto, siempre es una opción como clase de activo dentro de una cartera diversificada. Pero sí creemos que en el contexto actual la renta fija tiene más que ofrecer.