Alger (Grupo La Française) | El creciente interés de los inversores por las prácticas medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) ha inspirado a muchas empresas a realizar cambios que hagan del mundo un lugar mejor. ¿Darán resultado los esfuerzos colectivos de los inversores?

Los inversores han aumentado considerablemente sus inversiones en materia de ESG, como se ha demostrado anteriormente. Según Bank of America (BofA), 4 de cada 10 dólares de las entradas de capital mundial se destinan a ESG. Además, casi el 80% de los encuestados por el banco están interesados en tener en cuenta los aspectos ESG en sus inversiones, mientras que el 29% de los 1.000 inversores en 2020 dijeron que la pandemia les ha hecho creer aún más firmemente que las cuestiones ESG son importantes.

Los inversores de todo el mundo están incorporando las cuestiones ESG de varias maneras. Una de ellas es a nivel de la empresa de gestión de activos. Otra consiste en excluir las inversiones en función de su puntuación ESG. Otros inversores se dedican a la inversión temática en materia de ESG en empresas con sólidas prácticas de ESG o a la inversión de impacto en empresas que tratan de impulsar un cambio específico en estas materias. Y lo que es más importante, algunos inversores se comprometen directamente con las empresas para instarlas a mejorar sus prácticas ESG.

Las investigaciones académicas sugieren que los acontecimientos negativos en materia de ESG pueden augurar beneficios más débiles y rendimientos bursátiles ajustados al riesgo más bajos. En cambio, los inversores pueden hacer un bien a la sociedad y a sus carteras al mismo tiempo realizando asignaciones a las inversiones centradas en ESG.