China: la ronda de relajación monetaria y las próximas ayudas fiscales parecen moderar el precio de la vivienda

Guillaume Tresca

Guillaume Tresca ( Generali AM) | Dado el riesgo a la baja para la actividad, revisamos nuestro crecimiento del PIB al 4,8% desde el 5,0% en 2024. De hecho, los últimos datos de actividad han sido débiles, ya que el sector de la vivienda sigue siendo un lastre para la economía y no se aprecia ninguna mejora. Las ventas de viviendas nuevas y los precios han seguido bajando, mientras que la inversión, lastrada por el sector de la construcción, se situó por debajo de las expectativas. Por su parte, la demanda de crédito privado sigue siendo escasa y la confianza de los consumidores, baja. Ante el riesgo de deflación y de no alcanzar el objetivo de crecimiento, los responsables políticos se han vuelto proactivos con varias decisiones y una retórica más audaz. En primer lugar, el PBoC (Banco Popular de China) ha aplicado recientemente una amplia relajación de los tipos de interés oficiales y ha adoptado una orientación de futuro pesimista que apunta a nuevos recortes en el cuarto trimestre. En segundo lugar, en un movimiento inusual, la reunión del Politburó hace algunas semanas insistió por primera vez en acciones para dar la vuelta al mercado inmobiliario y prometió un apoyo fiscal largamente esperado. Las medidas adoptadas van en la buena dirección y muestran una clara voluntad de apoyar la economía y la confianza de los consumidores. La atención se centrará ahora en el tamaño y la forma del estímulo fiscal que debería anunciarse a las próximas semanas.