Banca March | El gobernador del Banco de España defendió ayer que las presiones deflacionistas no van a variar, destacando el papel de la globalización, la digitalización o el envejecimiento, y calificando el actual repunte de la inflación como transitorio. Además, Pablo Hernández de Cos asegura que el objetivo de 2% de inflación debe dejar de ser percibido como un límite superior (el IPC de agosto de la eurozona fue del 3%), siendo la previsión del IPC para 2023 del 1,5%, lejos todavía del objetivo. También ha aclarado que el BCE solo se planteará el alza de tipos de interés cuando la inflación subyacente (y su perspectiva a 18 meses) se aproxime al 2%.
El gobernador del Banco de España, apuntó: «La reciente subida de la inflación sólo es temporal. Seguiremos vigilando la inflación, pero no hay indicios de efectos de segunda ronda. En el caso de que persista la presión de la inflación el BCE tiene herramientas para actuar”.