J.P. Morgan | Los datos de una encuesta reciente de la Federación Nacional de Empresas Independientes muestran que las pequeñas empresas de Estados Unidos tienen previsto subir los precios, debido al contexto de fuerte demanda y oferta limitada en que se encuentran. 

A muchas empresas les está costando contratar personal y las ofertas de empleo alcanzan niveles record. Esta aparente escasez de mano de obra está obligando a las empresas a aumentar los salarios para atraer y retener a los trabajadores. Esto, combinado con el aumento de los costes de las materias primas y la logística, está presionando al alza los costes de los inputs.

Sin embargo, la solidez de la demanda de los consumidores en relación con lo que las empresas pueden ofrecer implica que se encuentran lo suficientemente cómodas como para trasladar estos costes a sus clientes. Mientras las empresas puedan seguir aumentando los ingresos a mayor velocidad que los precios de los inputs, los beneficios continuarán mejorando.