Ana Racionero (Intermoney) | Las bolsas asiáticas daban continuidad al “rally” de la renta variable americana, a excepción de las chinas, que tocaban nuevos mínimos por el temor a los riesgos financieros. Japón publicaba su IPC de diciembre, que caía del 2.8% al 2.6% vs 2.5%. La subyacente cedía una décima hasta el 3.7%. El descenso de la inflación nipona echa un capote al BOJ en su decisión de mantenerse en su política monetaria ultra laxa. Suzuki volvía a advertir de la importancia de que el mercado de divisas refleje los fundamentales.
Las ventas minoristas británicas caían en diciembre de forma estrepitosa en la que era su mayor caída desde el confinamiento por COVID de hace tres años, con un descenso del -3.2% vs – 0.5%, y, unidas al dato de inflación del pasado miércoles, reflejan un panorama para el Reino Unido de un crecimiento pobre y una inflación persistente y aumenta el riesgo de que la economía entre en una recesión poco profunda a finales de 2023. Los precios de producción alemanes retrocedían en diciembre un -1.2% mensual y un -8.6% interanual, superando las previsiones. Estas cifras daban lugar a una cierta recuperación de los bonos después de las caídas de esta semana.
E.E. U.U. volvía a superar sobradamente las expectativas con unas fabulosas cifras del consumidor de la Universidad de Michigan. En el apartado de percepción, la lectura de enero ascendía del 69.7 al 78.8 vs 70.1. El de expectativas reflejaba un aumento del 67.4 al 75.9 vs. 67. El de situación actual subía del 73.3 a nada menos que un 83.3 vs 73. Además de eso, las perspectivas de inflación a un año descendían del 2.9% al 2.8% vs 3% y, a cinco años, del 0.8% a un -1% vs 0.3%. Por el contrario, las ventas de viviendas de segunda mano defraudaban con un -1% vs 0.3%. Las robustas cifras de Michigan daban lugar a un aumento de las rentabilidades a corto plazo que aplanaba las curvas, prácticamente igualando la rentabilidad de los UST a dos y a treinta años, y empujaba el S&P hasta acercarlo a máximos históricos. Golsbee, de la FED, afirmaba que un descenso continuado de la inflación justificaría un debate sobre la posibilidad de recortar tipos, pero subrayaba que el banco central tomará las decisiones reunión a reunión.
El petróleo se mantenía estable con el WTI en el entorno de los 74 USD por barril, a pesar de los nuevos ataques hutíes a un buque estadounidense en el Mar Rojo.