Turquía sube tipos, al 30%

Thomas Gillet, director asociado del sector público y soberano de Scope Ratings | Desde julio, la inflación en Turquía ha aumentado a un ritmo más rápido que el tipo de interés oficial, lo que significa que el tipo de interés oficial real se adentra en territorio negativo. Invertir esa tendencia para que el banco central se adelante a la curva es sin duda uno de los mayores retos actuales.

– En este sentido, la subida del tipo de interés oficial de Turquía al 30% es un acontecimiento positivo. La decisión respalda la credibilidad del cambio de política monetaria iniciado tras las elecciones y demuestra la determinación de centrase en la inflación, aunque ello pueda lastrar las perspectivas de crecimiento para el próximo año. El cambio de política monetaria también parece más coherente tras las recientes declaraciones del presidente Recep Tayyip Erdogan sobre la política de tipos de interés.

– Este endurecimiento de la política debería contribuir a atraer a los inversores extranjeros y, con el tiempo, a reequilibrar las balanzas exteriores. Sin embargo, esto aún no se refleja en las cifras de la balanza por cuenta corriente, que desde enero acumula un déficit de más de 42.000 millones de dólares, es decir, unos 10.000 millones de dólares más que en el mismo periodo del año anterior, debido principalmente a las elevadas importaciones de energía.

– Esto significa que Turquía se encuentra aún en las primeras fases del ciclo de endurecimiento monetario y se necesitará tiempo para borrar años de política monetaria ultra laxa. El banco central tendrá que mantener un enfoque coherente para controlar la inflación, que seguirá siendo persistentemente alta tras la significativa depreciación de la lira. La orientación de la política monetaria es uno de los principales determinantes del rating de Turquía en divisa extranjera a largo plazo (B-/Negativo). Nuestra próxima revisión de la calificación del país está prevista para en enero de 2024.

– Hemos revisado nuestra proyección del tipo de interés oficial a final de año al 40% y la inflación media anual al 55%.