Solo Volvo estaba en camino de cumplir las exigencias originales sobre emisiones

Banca March | La industria automotriz europea da un suspiro de alivio: la presidenta de la Comisión Europea plantea la flexibilización en la normativa de emisiones.  Para finales de 2025, los fabricantes de automóviles estaban obligados a reducir en un -15% la emisión promedio de los vehículos vendidos de la UE (de 110,1 g de CO2/km en 2021 a 93,6). Bajo la propuesta de Ursula von der Layen en el encuentro con la asociación europea del automóvil (ACEA), el cumplimiento ahora se basará en las emisiones promedio durante el período 2025-2027, en lugar de imponer la meta estrictamente a cierre de 2025. A pesar de este cambio, se mantienen los objetivos de rebajar las emisiones en un 55% para 2030 y un 100% para 2035. 

La demanda de vehículos eléctricos ha crecido a un ritmo más lento de lo esperado, y la adaptación al límite de la normativa se ha convertido en un desafío significativo para la industria automotriz. De hecho, Volvo es el único fabricante en camino de cumplir con las exigencias originales. Desde ACEA se había estimado que no flexibilizar las sanciones para 2025 podría acarrear pérdidas totales de hasta 16 mil millones de euros. La iniciativa de von der Leyen aún requiere la aprobación de los Gobiernos y del Parlamento Europeo, pero ya ha sido recibida con entusiasmo por representantes de algunos países miembros, como el ministro de Industria de Italia, y por altos ejecutivos del sector automotriz.