El euríbor cierra agosto con una media mensual del 4,072%, siendo el primer descenso del índice desde hace más de un año

Adrián Hostaled (XTB Brokers) | El euríbor cerrará el mes de agosto con una media mensual (con los datos conocidos hasta hoy) del 4,072%, una cifra ligeramente inferior a la de julio (4,14%), en lo que supone el primer descenso de la media mensual de este índice desde hace más de un año.

Los datos de consumo y producción que conocimos la semana pasada por medio de los PMIs de la zona euro en su conjunto como de sus países de forma individual nos han dejado indicios de contracción de la economía. En el caso de Alemania los tintes son ya de preocupación por un posible crecimiento nulo en los próximos 3-4 trimestres. La situación difiere de lo que vemos al otro lado del Atlántico, dado que en ambos continentes se está reduciendo paulatinamente la inflación (la subyacente persiste algo más pegajosa) pero en Europa esto está viniendo acompañado de un enfriamiento y desaceleración de la economía.

En Estados Unidos la economía está mostrando una sorprendente fortaleza, exceptuando contadas referencias como el índice de confianza “Conference Board” que se utiliza como indicador adelantado y se publicó ayer martes (106,1 vs 116,1 esperado) mostrando una percepción menor en la capacidad adquisitiva de los encuestados.

Este contexto favorece que el pivote en la subida de tipos de la FED y el BCE puedan ser simultáneos, pese a que en Estados Unidos los tienen actualmente situados un 1,25% por encima de los nuestros (5,5 vs 4,25).

Lo que el mercado ya ha descontado casi por completo es que los tipos van a permanecer en su punto más álgido varios meses, un tiempo más prolongado de lo que se esperaba. Este escenario ha seguido ganando fuerza con los agresivos discursos de varios miembros de la FED liderados por Jerome Powell durante el simposio de Jackson Hole.

Lagarde tampoco se quedó atrás dibujando un restrictivo panorama en el que sostiene intocable el objetivo del 2% de inflación. El famoso pivote en este extenso periodo de subida de tipos podría llegar a finales del segundo trimestre del 2024.

Con este mes de agosto ya encadenamos en Europa 14 meses de ciclo de incrementos en las tasas de interés y ya se está haciendo mella en el empleo, el consumo y sobre todo en el acceso al crédito. Es decir, el endurecimiento crediticio está logrando el comprometido objetivo que buscaba, no sin antes teñir el cielo de incertidumbres para Europa de cara al último trimestre del año.

La demanda tanto de crédito corporativo como de créditos familiares y personales sigue en caída, y aunque el ratio de morosidad que reflejan los grandes bancos en sus balances no está sufriendo grandes cambios, sí que reportan un claro desinterés y una dinámica bajista en la solicitud de préstamos.

El Euríbor a 12 meses ha aumentado en 282 puntos desde agosto del año pasado, pero este continuado ascenso se interrumpe con la media final de este mes, que todo apunta a que finalizará por detrás de la de julio. La última medición de ayer martes se situó en 4,07%, lo que supone una ligera disminución de esta referencia clave para todos.

Por tanto, podemos confirmar el primer descenso en la media mensual del Euríbor desde que el BCE inició este ciclo de subidas.

Tomando como referencia el importe y el plazo de amortización medio de una hipoteca en España, que son 150.000 euros y 25 años, en el caso de una revisión anual de los intereses, la subida sería de 2.390 euros, lo que se traduce en un aumento de la cuota mensual de casi 200 euros.

Desde XTB consideramos que el euríbor puede permanecer varias semanas estabilizado en el entorno del 4,1%. La reunión prevista por el Banco Central Europeo para el 14 de septiembre en la que nos actualizarán los tipos de interés nos traería un suave incremento en el Euríbor que ponga fin a un receso de 8-10 semanas de calma relativa con este indicador. Los datos de inflación y crecimiento del PIB condicionarán las decisiones del organismo europeo, pero actualmente el escenario que gana terreno es una nueva subida de 25 puntos básicos en los tipos por parte del BCE en septiembre y la puerta abierta para hacer una pausa en la reunión del último jueves de octubre.