La producción industrial de la eurozona: -3.2%

Fernando Marcos (Intermoney) | El IPC de EE. UU. de febrero nos devolvió una estampa que refuerza la idea de que las bajadas de tipos no llegarán antes de junio. La resistencia del dato y la reducción del ritmo de moderación hace temer que podría estancarse en torno al 3% o en el peor de los casos repuntar y como comentábamos ayer, el camino podría resultar algo más tortuoso. Las señales en Europa tampoco son claras, el IPC armonizado alemán confirmó la lectura final de +0.6% y la interanual se queda al 3.4%.

La primera reacción al dato fue parálisis y de inmediato, ventas de deuda en el entorno del 10 años americano, repuntando las rentabilidades hasta el 4.15% y también, pero menores, en Europa y pronto recuperó el nivel previo. En la renta variable, sorprendentemente, predominaron las compras. El Nasdaq se anotó un +1.54% hasta los 16.265 puntos, el S&P500 subió un +1.12% hasta los 5.175 puntos y el Dow Jones un +0.61%. A este lado de la orilla el verde lo lidera el Mib italiano, con subidas de +1.31%, el Dax alemán alcanzó máximos históricos con casi 18000 puntos y Eurostoxx-50 como Stoxx 600 sumaron un +1%. El Ibex después de anotarse un +0.61% hoy arranca con fuerza, llegando a máximos de seis años por encima de 10.400 puntos y donde Inditex es el claro protagonista al anunciar beneficios récord de 5381 millones y eleva un 28% el dividendo para sus propietarios.

Las declaraciones institucionales de Villeroy aclararon más la posición al afirmar que hay un amplio consenso para que el ECB empiece a recortar tipos esta primavera, gracias a los avances conseguidos en el control de la inflación y nos recuerda que la primavera termina el 21 de junio, aunque podría tratarse de una dinámica de mensajes persuasivos hacia resto de los miembros. Las declaraciones vinieron precedidas de la revisión a la baja de las expectativas de inflación subyacente del banco central francés a 2.4% desde 2.8% estimado anteriormente y del cálculo de la evolución salarial con una rebaja de 3.2% frente a 4.1% anterior. En todo caso, el mercado asigna un 88% de probabilidades al 6 de junio y tras las contundentes palabras de Lagarde al respecto, parece posible que sin esperar a la Fed.

Nuevas desde China relativas al sector inmobiliario, pues los poseedores de bonos onshore de Country Garden Holdings afirman que no han recibido un pago de cupón que venció ayer y que la compañía ha solicitado un periodo de gracia de 30 días para abonar los 96 millones de yuanes. Muchos promotores están tratando de vender inmuebles adquiridos en su momento fuera del país a lo que se suma las condiciones de financiación más elevadas, lo que está obligando a enajenar activo con descuentos de hasta el 60%, afectando a promotores foráneos y a otros países. Las medidas de estímulo planteadas en diciembre, aparentemente, están resultando insuficientes.

Desde Japón han comenzado las negociaciones salariales anuales con fuerza. Toyota Motor acordó el mayor aumento salarial de los últimos 25 años, aumentan las expectativas de que esto se reproduzca en más compañías y las posibilidades de que el Banco de Japón reduzca gradualmente su enorme estímulo monetario.

En el Reino Unido el PIB de enero avanza 0.2%, como el consenso vaticinaba tras la caída de diciembre, donde entró en recesión al encadenar 2 trimestres seguidos de contracción. El ascenso viene de la mano de 1.1% de la construcción, pues la producción industrial cayó 0.2%. En clave claramente electoral, Jeremy Hunt indicó que demuestra que la economía está avanzando y que seguirá bajando impuestos. También contamos con la balanza comercial de bienes de 14.515 millones de GBP intermensuales en enero, frente a los 15.000 millones de GBP esperados.

Llegó el turno de la producción industrial de la eurozona, con descensos del 3.2% y del 2.1% en el conjunto de la Unión. Aumentó en la eurozona para bienes intermedios 2.6% y un 0.5% en energía, cayendo 14.5% para bienes de capital, 1.2% bienes duraderos y 0.3% bienes no duraderos. La lectura es que continuamos en la franja de ralentización de la actividad económica y que la arrogancia, a veces, nos hace olvidar que la fortaleza es aceptar que siempre hay incertidumbre.

Es destacable en los mercados de deuda flujos importantes en el corto plazo y el continuo fortalecimiento de la deuda soberana de los emisores periféricos con respecto al Core, pero hoy con escasa actividad.