Fernando Rodríguez | Fondos e inversores de todo tipo lanzaron 173 campañas activistas en 2021 en todo el mundo, el 5,9% menos que en el ejercicio precedente, según el 2021 Review of Shareholder Activism elaborado por la firma de asesoría financiera Lazard.
El mercado norteamericano concentró el 55% de las campañas, seguido del europeo, en el que se produjeron el 29% de las operaciones activistas.
A nivel global, una de cada cuatro campañas –el 26%- fueron protagonizadas por “activistas puros (full-time activists)”, y las firmas más productivas fueron el gigante activista norteamericano Elliott Management -17 operaciones-, el también especialista estadounidense Jana Partners -7- y la compañía de inversión británica Bluebell Capital Partners -6-.
El desacuerdo con una compra o venta de empresa fue el principal motivo de las campañas en un 43% de las ocasiones, seguido de la petición de un cambio en el consejo de administración, en el 30%. Aunque el objetivo de cambiar el equipo directivo o management sólo fue el detonante del 5% de las campañas si se consideran todos los mercados, este porcentaje subió al 19% en el caso exclusivo de Europa. Con todo, según el informe, “2021 vio una rápida proliferación del ESG como palanca de las plataformas de activistas” y también a “activistas tradicionales incorporando vectores ESG a sus campañas”.
Los activistas ganaron 89 puestos en los consejos de administración en cuestión –el 73% de ellos en Estados Unidos-, y en el 82% de las ocasiones los alcanzaron a través de un acuerdo con las compañías.
El 24% de las campañas se dirigió a firmas del sector financiero; el 18%, a empresas industriales; y el 14% restante a compañías de salud.
Las compañías de mayor capitalización bursátil involucradas en activismo fueron, en Estados Unidos, Exxon, Duke Energy y General Motors. En el resto del mundo, las mayores empresas que resultaron ser un target activista fueron la holandesa Shell, la británica GSK y la brasileña Vale.
Europa registro 50 campañas activistas en 2021, el 12% menos que un año antes, pero sólo en el último trimestre se lanzaron 16 de ellas. Los grandes activistas “están de vuelta en Europa”, según el estudio, y protagonizaron el 26% de las operaciones, frente al 16% de un año antes, con Elliott copando 4 de cada 10 campañas en esta área geográfica.
España no figura en el top 10 mundial de los mercados con mayor activismo.