Manuel Moreno Capa (Director de GESTORES) | Diversificar es la clave de la inversión en fondos. Pero en estos momentos es más importante que nunca no sólo la diversificación clásica entre renta fija y variable, sino también determinar por qué sectores y mercados de renta variable apostar de cara a un futuro en el que la otra gran clave será la incertidumbre. Siempre ha habido incertidumbres, pero reconozcamos que tanto la pandemia como la guerra de Putin nos están dejando claro que el mundo, y los mercados, van a ser cada vez más inciertos e imprevisibles.
La semana pasada recordábamos que la recomendación de diversificar es uno de los consejos habituales para el inversor en fondos. Una recomendación en la que coinciden los analistas que forman parte del Consejo Editorial de la revista GESTORES. En el último número de esta publicación (editado junto con la revista CONSEJEROS del mes de abril), les pedimos a cada uno de nuestros consejeros tres recomendaciones básicas en estos momentos de cambio de era en el mundo y en los mercados. Sus consejos fueron diversos, pero si uno se repitió con insistencia fue el de diversificar. La siguiente cuestión a la que nuestros consejeros respondieron es en qué sectores y mercados con potencial plasmar esta diversificación.
“Mi primera recomendación, teniendo en cuenta el momento actual, es ir empezando a incluir en carteras de renta variable el factor value, para invertir en compañías con valoraciones atractivas y capacidad de generar beneficios estables para el accionista”, apuntaba nuestra consejera Ana Claver (CFA, directora gerente de Robeco Iberia, Latam y US Offshore y presidenta del Comité de Sostenibilidad de CFA Society Spain). Al centrarse en sectores concretos, Claver apuesta por “fondos que inviertan en toda la cadena de valor para descarbonizar la economía, energías limpias, nuevos materiales, economía circular y agua. Y también en las nuevas tendencias en el sector financiero, con la digitalización por medio del blockchain, o la ciberseguridad”.
“Las megatendencias ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno empresarial) son ganadoras del futuro”, subraya nuestro consejero Gonzalo Rengifo (director general de Pictet AM en Iberia y Latam), que enumera los importantes sectores involucrados en esta corriente: “Renovables, eficiencia energética y economía desmaterializada (software y fabricantes de equipos para semiconductores)”. Sin olvidar el sector salud, donde “existe una excelente oportunidad para empresas innovadoras y nuevos modelos de negocio”.
Además de tener claros los sectores, conviene precisar también en qué mercados mundiales diversificar. “En Estados Unidos conviene tener un poco de paciencia y prudencia en el sector tecnológico, ya que todavía una parte del mismo está posicionada para un futuro a largo plazo, que es poco probable que funcione, como lo demuestra recientemente la dificultad de Facebook para aumentar su audiencia”, subraya nuestro consejero Lorenzo González (CAIA, Institutional&Advidsory Business Sales Director en Nordea). También opina que las tecnológicas chinas comienzan a estar baratas y que las acciones europeas no están caras.
Los mercados orientales también llaman la atención de Gonzalo Rengifo: “Atención a los mercados emergentes. Más del 60% del crecimiento va a venir de la región asiática, incluyendo China. La región representa casi el 30% del PIB mundial, pero su peso en los índices bursátiles y de renta fija no supera del 7 al 10%”. Añade que “su PIB puede crecer el doble de rápido que el resto los próximos cinco años, con menor inflación, sus monedas están infravaloradas y las valoraciones son razonables respecto a la previsión de crecimiento, hasta el punto de que cualquier inversor debería complementar su cartera de mercados desarrollados con Asia emergente, en renta variable y fija”.
Una vez vistos sectores y mercados, la siguiente cuestión es qué tipo de fondos y estrategias utilizar para acceder a ellos, algo de lo que hablaremos en la próxima columna de esta sección.
