Bankinter | La Agencia Internacional de la Energía recortó ayer su estimación de demanda de crudo e hizo referencia a la pérdida de influencia de la OPEP. En concreto, estimó que el aumento de demanda de petróleo a nivel global será de +2,8Mbd. en 3T 2023 y +1,9Mbd en 4T 2023 (en 4T supuso una reducción de -400.000bd con respecto a lo estimado hace un mes). En 2024, estimó +1,1Mbd. Los principales factores que influyen en la menor demanda son las subidas de tipos de interés, el auge del coche eléctrico, la mejora de la eficiencia y la debilidad de la economía europea, particularmente su industria. Por otra parte, consideró que el aumento de producción en 2024 procederá principalmente de EE.UU., Guyana y Brasil y llevará a un incremento de oferta de +1,2MBarr., superior al aumento de demanda +1,1Mbarr. En paralelo, hizo referencia a la pérdida de influencia de la OPEP+. En la actualidad cuenta con el 51% de la oferta global, el menor nivel desde su formación en 2016, lo que reduce su capacidad de influencia en el mercado. EE.UU. ya es líder mundial en producción (20Mbd) y espera que siga siéndolo el próximo año.
Opinión del equipo de análisis de Bankinter:
esta moderación de la demanda estimada por parte de la AIE es una buena noticia porque, si se cumple, implicará una caída de los precios del petróleo, lo que es positivo para ciclo económico y para mercado. También hizo referencia a la pérdida de influencia de la OPEP. De hecho, lo que reflejó la última reunión fue una evidente falta de consenso entre los miembros integrantes que incluso tendrán que reunirse