Banca March | La situación en Ucrania se ha agravado rápidamente durante las últimas horas tras el reconocimiento ruso de la soberanía de los territorios separatistas del este del país. Durante el discurso de reconocimiento, Putin esgrimió que «Ucrania no es solo un país vecino para nosotros, es parte inseparable de nuestra cultura» y calificó la situación actual del país de ser «un títere de Occidente». Tras la firma, Putin ha ordenado el envío de tropas a la región, con testigos presenciando la llegada de tanques a Donetsk esta misma madrugada. Todavía no hay claridad -varios diputados de la Duma han expresado opiniones contrarias- sobre si la interpretación del reconocimiento se limitará a los territorios controlados por los prorrusos o si se circunscribirá a la totalidad de los oblasts de Donetsk y Lugansk, de los cuales dos tercios están bajo control ucraniano. En Ucrania, el presidente Zelenski se dirigió a la nación en un breve mensaje de cinco minutos donde calificó la gravedad de las acciones rusas y señaló que «puede significar la retirada unilateral de Rusia de los acuerdos de Minsk». En clave internacional, Estados Unidos ha prohibido cualquier relación económica con las regiones separatistas y ha trasladado al personal diplomático a Polonia. Por otra parte, Reino Unido aprobará hoy «sanciones significativas» que serán aplicadas de inmediato, mientras la UE prepara una reunión de urgencia esta mañana para aplicar sanciones en la misma línea, aunque no se conocen aún más detalles. Turquía, otro actor importante en la región, ha considerado «inaceptable» la decisión rusa de reconocer a Donetsk y Lugansk, mientras China, aliada de Rusia y con intenciones similares en Taiwan, se ha limitado a pedir «moderación» a ambas partes.