Las bolsas europeas interrumpen su tendencia alcista de finales de año

Deutche Börse

Fátima Herranz González (Singular Bank) | Los mercados de renta variable mundiales continúan registrando variaciones moderadas en la recta final del año, en una coyuntura marcada por la propagación de la variante ómicron del coronavirus a nivel global. En las últimas semanas se ha moderado la preocupación ante la creciente evidencia de que la nueva cepa produce síntomas leves en términos generales, aunque los casos diarios continúan aumentando rápidamente. Ayer se registraron más de 1 millón de contagios globales por segundo día consecutivo.

La rápida propagación de ómicron ha llevado a los gobiernos europeos a endurecer las restricciones a la actividad socioeconómica, al mismo tiempo que China ha reintroducido limitaciones de movilidad en algunas ciudades ante los nuevos brotes detectados. No obstante, en el resto de principales economías asiáticas por el momento no se ha observado un impacto significativo, lo que se ha visto reflejado en el aumento de los desplazamientos por carretera. Una situación que apoya las expectativas de demanda de combustible a corto plazo, a pesar del impacto negativo que están sufriendo las aerolíneas por la cancelación de numerosos vuelos en los últimos días debido a la falta de personal, especialmente en EEUU.

Adicionalmente, se mantiene el punto de mira en los indicadores de actividad de la economía china, en un contexto de deterioro de la confianza ante los riesgos asociados a su sector inmobiliario y la supervisión del Gobierno de Xi Jinping de las ventas de acciones en el extranjero, entre otros factores. Todo ello unido a las perspectivas de que las autoridades económicas continúen agregando estímulos el próximo año, tanto fiscales como monetarios, para apoyar el crecimiento de las segunda potencia económica mundial. En este sentido, el Banco Popular de China (PBoC) afirmó a comienzos de semana que utilizará sus herramientas de política monetaria para mantener la liquidez en niveles razonables y garantizar el aumento del crédito. En la misma línea, el Ministerio de Finanzas ha reiterado que implementará nuevas medidas fiscales para estabilizar el crecimiento, proyectando mayores recortes de impuestos y tarifas en 2022. 

La política de mayor flexibilidad del PBoC abre un escenario de creciente desacoplamiento de la estrategia de los principales bancos centrales. Frente al mayor tono expansivo de China, las autoridades monetarias de las economías avanzadas han acelerado la normalización de sus estímulos. 

A la espera de mayor visibilidad sobre los riesgos de la senda de crecimiento económico global el próximo año, los mercados financieros no registran movimientos especialmente significativos, en una semana en la que el volumen de operaciones se mantiene reducido debido a la temporada navideña.

En la región Asia-Pacífico, sus principales índices bursátiles han cerrado hoy con signo negativo, destacando las caídas del Shanghai Composite chino (-0,91%), el Kospi de Corea del Sur (-0,89%) y el Hang Seng de Hong Kong (-0,83%). La principal excepción se ha situado en Australia, donde el ASX 200 ha repuntado un 1,21% tras dos jornadas festivas.

Siguiendo la misma tendencia, en la renta variable europea también ha predominado el rojo, excepto en el caso del FTSE 100 británico que ha reanudado su cotización después de Navidad con una subida de un 0,66%, alcanzando su mayor nivel desde febrero de 2020. En la Eurozona, el DAX 40 alemán ha liderado los descensos(-0,70%), seguido del CAC 40 francés (-0,27%) y del IBEX 35 español (-0,17%).

En España, el IBEX 35 ha interrumpido su senda alcista de las cinco jornadas anteriores, retrocediendo ligeramente a 8.674 puntos. Las mayores pérdidas se han concentrado en Grifols (-2,47%), Meliá Hotels (-1,56%) y Repsol (-1,11%), contrastando con las ganancias de Cie Automotive (+1,04%), Bankinter (+0,98%) y Acerinox (+0,88%).

Por otro lado, en EEUU destaca la toma de beneficios en los sectores de energía, comunicaciones, consumo cíclico y tecnologías de la información, lastrando principalmente la cotización del índice Nasdaq Composite (-0,38%). Por su parte, el S&P 500 se mantiene estable en 4.786 puntos.