El PIB de EEUU en el 2T23 crece un 2,1% anual frente al 2,4 % de la estimación inicial , lo que facilitaría que la Fed “levante el pie del acelerador”

Economía de EEUU

J.J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una jornada en la que la inflación retomó protagonismo, las bolsas europeas cerraron ayer en forma mixta, con sus principales índices terminando el día sin grandes variaciones. No obstante, el comportamiento de los mercados de valores de la región fue de más a menos. Así, y tras comenzar el día al alza, la publicación en España y en Alemania de las lecturas preliminares del IPC de agosto, que mostraron en ambos casos que esta variable continúa mostrándose más reticente a reducirse de lo que sería deseable, provocó que tanto los mercados de bonos como de acciones de la Eurozona se giraran a la baja. Los inversores ven en estas cifras, que muestran una persistente alta inflación, la constatación de que el BCE volverá a incrementar sus tasas de referencia cuando reúna en septiembre a su Consejo de Gobierno. En este sentido, cabe destacar que ayer, tras la publicación de las mencionadas cifras, los futuros daban una probabilidad del 60% a que el BCE vuelva a subir sus tasas oficiales en 25 puntos básicos en septiembre cuando el pasado viernes esta probabilidad no alcanzaba el 50%.

En Wall Street la sesión de ayer corrió por otros derroteros, cerrando sus principales índices con alzas, muy cerca de sus niveles más altos del día. En este mercado se están “celebrando” con alzas cualquier dato que muestre una cierta desaceleración de la economía y del mercado laboral estadounidense, ya que se interpreta que ello debería hacer que la Reserva Federal (Fed) dé por finalizado el proceso de alzas de tipos. Así, ayer la ligera revisión a la baja del PIB del 2T2023, que situó su crecimiento intertrimestral anualizado en el 2,1% frente al 2,4% de la estimación inicial -recordamos que el PIB del 1T2023 había crecido a una tasa intertrimestral anualizada del 2,0%- y la publicación por parte de la procesadora de nóminas ADP de las cifras de creación de empleo privado neto de agosto, que no alcanzaron lo esperado por los distintos consensos de analistas, fueron bien recibidas por unos inversores que ven en estas cifras la confirmación de que el crecimiento de la economía estadounidense se está ralentizando y el mercado laboral enfriando, en ambos casos, ligeramente, lo que podría facilitar que la Fed “levante el pie del acelerador” y no suba sus tipos oficiales en la reunión de su Comité Federal de Mercados Abierto (FOMC) de septiembre. No obstante, el hecho de que esta ralentización no se esté produciendo de una forma alarmante, hace que se descarte un posible escenario de entrada en recesión de esta economía en el corto plazo, algo que hace unos meses se daba por descontado. Este escenario económico, “ni muy frío ni muy caliente”, es el ideal para que las bolsas estadounidenses puedan mantener el buen comportamiento mostrado en lo que va de año. Nuestra duda, y la de una parte importante del mercado, es cuánto tiempo se podrá mantener el mismo.

Más a corto plazo, y centrándonos en la sesión de hoy, destacar que la jornada presenta una agenda macroeconómica bastante intensa, en la que la inflación volverá a ser protagonista. Así, por la mañana conoceremos las lecturas preliminares del IPC de agosto de Francia, Italia y de la Eurozona en su conjunto, lecturas que, como sucedió ayer con las de España y Alemania, no esperamos que traigan demasiadas “buenas noticias”, ya que, si se cumplen las expectativas de los analistas, la inflación habrá vuelto a repuntar en Francia, mientras que habrá descendido sólo ligeramente tanto en Italia como en la Eurozona. También por la mañana, el BCE dará a conocer las actas de la reunión de su Consejo de Gobierno del pasado mes de julio, actas que serán escrutadas por los inversores para poder determinar si sus miembros apoyan nuevas subidas de tipos y en qué cuantía lo hacen. Además, y ya por la tarde, conjuntamente con los datos de gastos e ingresos personales de julio, el Departamento de Comercio de EEUU publicará el índice de precios del consumo personal, el PCE, la variable de precios “de referencia” para la Fed. En principio se espera que tanto el PCE general como su subyacente hayan repuntado ligeramente en el mes. Cualquier lectura que indique un mayor repunte del esperado será muy negativamente acogida por los mercados, mientras que, en sentido contrario, si esta medida de inflación se ha comportado mejor de lo estimado por los analistas, tanto los mercados de bonos como los de acciones reaccionarán al alza.

Para empezar, y a la espera de que se vayan publicando las cifras de inflación mencionadas, esperamos que HOY las bolsas europeas abran entre planas y/o ligeramente a la baja. Señalar que esta madrugada se han publicado en China los índices oficiales de gestores de compra de los sectores manufactureros y no manufactureros, los PMIs de agosto, índices que en conjunto han venido a confirmar el estancamiento de la actividad privada en el país en el mes señalado. En este sentido, cabe recordar que la debilidad de la economía china está lastrando el comportamiento bursátil de muchas multinacionales europeas, con elevada exposición a este mercado, compañías que manejaban elevadas expectativas con relación al impacto que la reapertura de China tras los confinamientos podía tener en la demanda de sus productos/servicios, expectativas que no se están cumpliendo en la medida de lo esperado.