Comienzo de una semana intensa

Ana Racionero (Intermoney) | La semana que empieza promete, pues viene repleta de datos macro de envergadura como el PIB del primer trimestre de la Eurozona y E.E. U.U. y los IPC de abril de Francia, Italia y España, así como la presentación de los resultados empresariales de empresas tecnológicas como Microsoft, Alphabet o Meta, para las que se prevé que registren esta temporada su mayor caída desde 2009. En cuanto al PIB de la zona euro, se prevé que registre un leve crecimiento que refleje la gran resiliencia frente a la crisis de los precios de la energía, si bien el invierno ha resultado suave, los gobiernos han contribuido apoyando a consumidores y empresas y muchos hogares disponían de ahorros con motivo de la pandemia. La otra cara de la moneda de una economía resiliente es que la rigidez del mercado laboral podría mantener la inflación subyacente más alta durante más tiempo. Las previsiones de los economistas de Bloomberg respecto a la inflación de España, Alemania e Italia son de una subida en abril, lo que añadiría presión al BCE para continuar subiendo los tipos durante el verano. En cuanto a bancos centrales, el miércoles tendrá lugar la reunión de tipos del banco central sueco, para la que está prevista una subida de 50 pb para dejar el tipo de interés de la corona sueca al 3.50% después de que las últimas minutas recogieran la preocupación respecto a que una corona débil pueda aumentar la inflación del país nórdico.

Hoy abríamos con la publicación del IFO de abril, que, en su apartado de situación empresarial, subía al 93.6, superando el 93.4 previsto y mejorando por sexto mes consecutivo. La evaluación actual descendía al 95.0 vs 96.0 de las encuestas, mientras que las expectativas ascendían al 92.2 vs 91.1. la fortaleza del dato desataba ventas de bonos. Villeroy y Panetta se referían a la volatilidad y a los precios, el primero en relación con el cambio climático y el segundo, con los riesgos geopolíticos. Wunsch decía que los inversores estarían subestimando el tipo terminal de la zona euro, que el BCE subiría los tipos hasta que se desacelere el crecimiento salarial, que vería claros indicios de efectos de segunda ronda y que no le sorprendería que el tipo de depósito se situara al 4%. Como consecuencia de estas declaraciones, el EURUSD volvía a romper el nivel del 1.10 y el “Atlantic Spread” se estrechaba 5 pb.

En el Reino Unido, S&P subía el viernes su perspectiva a estable desde negativa tras los últimos datos más favorables de lo esperado, los cuales, junto con la última cifra de inflación, han hecho que los mercados monetarios sitúen el tipo terminal de la esterlina por encima del 4.75%.

En E.E. U.U., el índice de actividad de la FED de Chicago repetía el anterior -0.19, en lugar de descender al -0.20 como estaba previsto. La actividad manufacturera de la FED de Dallas se desplomaba al -23.4 frente al -12 estimado.

En cuanto al petróleo, su precio se estabilizaba tras precipitarse la semana pasada un 5.6% con motivo del miedo a una recesión global, y el WTI se mantenía en el entorno de los 78 USD por barril.

El yen, que se había apreciado después de que la última lectura de IPC superase las previsiones, retrocedía frente a sus pares cuando Ueda, el nuevo gobernador del BOJ, afirmaba que sería prematuro hablar de modificar la política monetaria.