Heineken reitera sus proyecciones de crecimiento atractivo a medio/largo plazo (sobre un +5% en los ingresos, +7% en el EBIT)

Heineken

Santander Corporate & Investment | Con motivo de su Día del Inversor, Heineken (A3 e, BBB+ e) reiteró sus previsiones de 2022 y las de un horizonte de medio plazo, así como su objetivo de crecimiento del EBIT de un dígito entre medio y alto. La compañía indicó que prevé que los volúmenes se mantengan estables o crezcan ligeramente el próximo año, con aumentos en los mercados en desarrollo y descensos en Europa. Heineken mantuvo su proyección de que el beneficio operativo de 2022 esté «muy por encima» del nivel de 2019 y de un crecimiento de un dígito entre medio y alto en 2023 en términos orgánicos. Además, para 2023 Heineken vaticina una tasa de crecimiento de los ingresos superior a la del EBIT, una inflación de los costes de los insumos en torno al 17-19% (más alta en el caso de la energía y en Europa) y que el ahorro bruto supere el objetivo de EUR 2mm gracias a ganancias de eficiencia en Europa.

Opinión de Research: Creemos que los inversores encontrarán alentador el que la compañía haya reiterado estos objetivos y la claridad sobre 2023, así como el aumento del ahorro de costes. Heineken ya ha observado signos de debilidad en la demanda de los consumidores, especialmente en Europa Occidental, y el equipo gestor parece muy consciente del riesgo de que se ralentice. No obstante, en nuestra opinión, la historia de inversión de Heineken se apoya en un crecimiento atractivo a medio/largo plazo (+c.5% en los ingresos, +7% en el EBIT) respaldado por una distribución geográfica y una cartera de productos que son las mejores del sector, un buen impulso en algunos de sus mercados emergentes clave y la mayor atención prestada por la compañía a la productividad bajo la batuta de su nuevo consejero delegado. La situación en Europa será complicada durante los próximos 12 meses (c.30% de los beneficios de Heineken, c.40% de exposición al canal horeca en Europa e integración en sentido descendente en la mayoría de sus principales mercados europeos, lo que significa un potencial apalancamiento operativo negativo a medida que los volúmenes de consumo en establecimientos hosteleros disminuyan). No obstante, pensamos que la cervecera dispone de suficientes mecanismos internos para capear el temporal y potencialmente conseguir un crecimiento del EBIT superior al de sus competidores en 2023. En nuestra opinión, la compañía está en buena posición para hacer frente a la complicada coyuntura del consumo y los costes (con holgura para superar el objetivo de ahorro de EUR 2mm, sinergias de Distell) y ahora tenemos visibilidad sobre 2023. Si bien reconocemos que incrementos de costes en torno al 17-19% podrían mermar la expansión de los márgenes en 2023, creemos que la solidez del balance permitirá a Heineken fomentar el crecimiento a largo plazo. La expansión de los márgenes a largo plazo depende de una recuperación sostenible de las ventas en establecimientos hosteleros, ya que este canal suele tener un margen más alto a partir de cierto volumen. La marca Heineken suele venderse con una prima del 30-50% respecto a las cervezas estándar. El impulso operativo ha sido fuerte este año, pero las perspectivas se ven empañadas por diversos factores de incertidumbre, como la evolución del comportamiento de los consumidores y las continuas presiones inflacionistas. Hasta el momento, la tendencia de desplazamiento del consumo hacia productos de gama más alta («premiumización») se ha mantenido y los consumidores han estado dispuestos a aceptar precios más altos, pero, si bien el equipo gestor reconoció que trasladaría toda la presión de los costes de los insumos a los consumidores, esto ha empezado a afectar al volumen de ventas en Europa. Dado que los bonos de Heineken cotizan caros respecto a otras cerveceras comparables, y no parecen especialmente atractivos desde el punto de vista de la valoración, mantenemos nuestra recomendación Neutral sobre el nombre.