Al BCE no le tiembla el pulso

Ana Racionero (Intermoney) | Bueno, pues después de que, en la sesión de ayer, las rentabilidades del dos, el cinco y el treinta años alemanes sufrieran las mayores caídas de su historia, y la del diez años, su mayor recorte desde 1990; de que se recalculara el pico de tipo de interés de la Eurozona al 3.10%; y de la mayor caída intradía del EUR desde la pandemia de 2020; pues bien, finalmente, el BCE se mantenía impertérrito y subía hoy los tipos de interés 50 pb, situando la facilidad de depósito al 3%. Si bien es cierto que, en el ínterin, el SNB salía al rescate de Credit Suisse, poniendo a su disposición un préstamo de hasta 50000 millones de CHF dado que, tanto el banco central, como el regulador suizo, apreciaban que la entidad financiera cumplía con los requisitos de capital y liquidez impuestos a los bancos de importancia sistémica. En otras palabras: Credit Suisse sería “too big to fail”. El SNB salvaba con esto los muebles, haciendo que las muy maltrechas bolsas se recuperasen parcialmente de las enormes pérdidas (las acciones de Credit Suisse llegaban a repuntar un 40%) y provocando un fuerte rebote en las rentabilidades de los bonos en una clara mejora del sentimiento de riesgo, aunque los indicadores de volatilidad se mantenían elevados. El euro se recuperaba de un mínimo de dos meses. Con todo y con eso, el mercado esperaba que el BCE rebajase la subida de hoy a 25 pb de los 50 prometidos, máxime cuando, a escasos 20 minuto del anuncio, de Guindos advertía de la posible vulnerabilidad de algunos bancos de la Eurozona frente a los tipos. Pero la entidad presidida por Christine Lagarde se mantenía firme en su compromiso, pese a todo, y adoptaba la decisión por una amplia mayoría, argumentando que preveía que la inflación se mantenga demasiado alta durante demasiado tiempo. Lagarde, en su posterior rueda de prensa, decía que el mercado laboral se seguiría mostrando fuerte, y que habrían aumentado las presiones salariales; que la economía parecía que se iría a recuperar en los próximos trimestres; que los riesgos para el crecimiento se habrían inclinado a la baja, y que la presión subyacente sobre los precios seguiría siendo fuerte. Subrayaba que el planteamiento del BCE seguiría dependiendo de los datos, y se reafirmaba en que el banco central no cejaría en su empeño de luchar contra la inflación. El tiempo dirá si la decisión es correcta, dados los paralelismos con aquella sonada subida de tipos en tiempos de Trichet. El mercado pasaba a situar el pico de inflación en julio al 3.25%.

E.E. U.U. publicaba sus peticiones de subsidios de desempleo, que descendían a 192k vs las 205k esperadas. El panorama de negocios de la FED de Filadelfia, por el contrario, se desplomaba a -23.2. Los mercados monetarios descuentan una subida de 25 pb para la reunión de la FED de la semana próxima.

octubre de 1987. El USD cedía frente al resto de divisas.