El camino hacia la bajada de tipos se estrecha

Francois Rimeu

François Rimeu (La Française) | Esperamos que la Fed mantenga estable el tipo objetivo de los fondos federales en su reunión de esta semana. Prevemos que el presidente de la Reserva Federal, Powell, indique que mientras la economía siga resistiendo, la Fed se tomará tiempo para evaluar la trayectoria de la inflación y asegurarse de que vuelve de forma sostenible a su objetivo del 2%. En consecuencia, el Comité mantendrá su postura restrictiva durante más tiempo de lo que se pensaba, sin descartar ninguna decisión de línea dura si fuera necesario, aunque no sea su escenario de referencia.

A continuación, nuestras expectativas para esta semana: 

  • La Reserva Federal dejará los tipos de interés sin cambios en un rango objetivo del 5,25% al 5,50%. 
  • El presidente de la Fed, Powell, indicará que la postura política es apropiada dada la continua fortaleza económica de EE. UU. combinada con una inflación superior a la esperada. 
  • Es probable que Powell sostenga que el banco central estadounidense plantee menos recortes de los tipos de interés este año que los tres recortes previstos por la mayor parte de los funcionarios de la Fed en marzo. En consecuencia, subrayará que el número, el calendario y la frecuencia dependerán de los datos de inflación y del mercado laboral. 
  • Se espera que la Fed confirme su plan sobre el futuro de la reducción de su balance recortando el límite del Tesoro de 60.000 millones de dólares a 30.000 millones al mes, probablemente en junio.

En resumen, la Fed debería responder con una postura más dura a los datos de inflación que han sido inesperadamente fuertes en marzo, por tercer mes consecutivo. Este contexto obligará al Comité Federal a adoptar un enfoque de espera, aplazando en consecuencia el inicio del ciclo de relajación. Creemos que la reunión de esta semana se centrará en cuánto tiempo se mantendrán altos los tipos de interés en Estados Unidos y en la posibilidad de otra subida de los mismos, lo que podría impulsar al alza los tipos de interés en Estados Unidos y traducirse en un fortalecimiento del dólar.