Un escenario positivo para todas las clases de activos de renta fija

Francois Rimeu

François Rimeu (La Française AM) | Los miembros de la OPEP+ se esforzaron por llegar a un acuerdo para recortar la producción de petróleo en 2,2 millones de barriles diarios en el primer trimestre. Gran parte de estas reducciones ya estaban previstas (Arabia Saudí y Rusia) y su cumplimiento parece ser potencialmente incierto a la vista de los desacuerdos existentes en el seno de la organización. Aun así, este hecho debería conducir al mercado hacia un déficit de oferta a principios del próximo año. Más allá de la reacción negativa del mercado tras el anuncio, en nuestra opinión el precio del barril debería mantenerse en torno a los niveles actuales en los próximos meses. 

La situación económica ha cambiado ligeramente. En la zona euro, el ritmo de crecimiento sigue en torno a 0, pero podría mejorar levemente a principios de 2024 si se materializa el repunte de los indicadores adelantados (ZEW, IFO, Sentix, etc.). Los aumentos salariales, ahora por encima de la inflación, también deberían contribuir a un ligero repunte del consumo. En Estados Unidos tampoco se han producido grandes cambios. Es evidente que el ritmo de crecimiento del tercer trimestre (5,2% anualizado) no es sostenible, pero el consumo sigue siendo firme y la situación de los hogares es bastante buena, por lo que hay pocas razones para que la situación económica se deteriore rápidamente.

El mercado prevé ahora que la inflación vuelva a acercarse a los objetivos de los bancos centrales y que la actividad permanezca firme sin ser excepcional. Este escenario es positivo para todas las clases de activos de renta fija y, en consecuencia, para los mercados de renta variable. En particular, esto debería permitir que los sectores que se han visto muy afectados por las subidas de tipos y cuyas valoraciones han caído con fuerza en los dos últimos años recuperen atractivo para los inversores. Las empresas de servicios públicos, el sector inmobiliario y las compañías de mediana capitalización figuran entre estas inversiones que podrían seguir beneficiándose de la fuerte disminución del riesgo inflacionista. Sin embargo, nos sentimos más cómodos con este escenario en Europa que en Estados Unidos por las razones explicadas anteriormente, así como debido a las elevadísimas próximas emisiones en Estados Unidos, que podrían ejercer cierta presión sobre el extremo largo de la curva de rendimientos estadounidense. Los próximos anuncios del Departamento del Tesoro sobre los importes y los tipos de emisión se vigilarán de cerca, sobre todo teniendo en cuenta que las condiciones financieras se han suavizado considerablemente.

Perspectivas para diciembre / enero

Los movimientos de noviembre fueron muy agresivos, pero no hay que subestimar las consecuencias del fuerte descenso del riesgo inflacionista, especialmente en la zona euro. Algunos sectores que han sufrido mucho están recuperando atractivo y gozan de valoraciones históricamente bajas. Actualmente favorecemos estos sectores.