Paolo Zanghieri (Generali Investments) | Las decepcionantes cifras de empleo de julio (sólo 114.000 nuevos puestos de trabajo y una tasa de desempleo del 4,3%) suscitaron el temor de que, en última instancia, la subida de los tipos conduzca a una recesión. Sin embargo, la revisión al alza de 0,2 puntos porcentuales del PIB del segundo trimestre y los datos publicados durante el verano siguen mostrando que la demanda interna se mantiene bien, con un aumento del Consumo Per Cápita real (PCE) del 2,6% interanual en julio y unos pedidos de bienes duraderos que sorprenden al alza. Las previsiones actuales apuntan a un crecimiento anualizado del 2% para el tercer trimestre; nosotros somos algo más prudentes (1,8%), ya que los hogares están mostrando dificultades, como pone de manifiesto el aumento de la morosidad de las tarjetas de crédito. Aun así, el PIB aumentará un 2,6% este año. Nuestra previsión para 2025, del 1,8%, está muy lejos de indicar una recesión.
Continúa el enfriamiento gradual de la inflación. La inflación subyacente de julio se situó ligeramente por debajo de las expectativas, pero aún en el 3,2%. El componente de servicios excluyendo la vivienda apunta más claramente a la baja. Esperamos que la inflación subyacente del PCE termine el año en el 2,6% interanual. La evolución salarial desempeñará un papel clave: en el segundo trimestre, el índice de costes laborales siguió desacelerándose hasta el 4,1%. Suponiendo una estimación conservadora de un crecimiento tendencial anual de la productividad del 1,8% (en elsegundo trimestre la producción por trabajador aumentó un 2,7% interanual), se está acercando al ritmo compatible con una inflación del 2%.
Un mercado laboral más débil provocará una normalización de los tipos ligeramente más rápida
Durante el verano, el tono de la comunicación de la Reserva Federal ha cambiado notablemente, y ha aflorado la preocupación por el mercado laboral. Aunque el reciente aumento de la tasa de desempleo se debe principalmente a una mayor oferta de mano de obra, las intenciones de contratación han disminuido. Como señaló el presidente Powell en Jackson Hole, los riesgos al alza para la inflación han disminuido, pero los riesgos a la baja para la actividad han aumentado. El actual precio de mercado de alrededor de 100 puntos básicos de recortes a finales de año no refleja el equilibrio real de los riesgos. No obstante, creemos que el enfoque gradual adoptado por la Reserva Federal es coherente con un recorte de 25 puntos básicos en cada una de las tres reuniones restantes de este año. Pensamos en un total de 100 puntos básicos de recorte para el próximo año, pero mucho dependerá de las políticas fiscales y comerciales que aplique el próximo presidente.