Bankinter | El grupo australiano Fortescue, cotizado en la Bolsa de Sídney y con una capitalización de más de 30.000M€, está negociando con Iberdrola (IBE) la adquisición del 49% de una cartera de 1.000MW solares y eólicos de Iberdrola. Esta cartera está valorada en, al menos, 900M€ (deuda incluida).
Opinión del equipo de análisis de Bankinter:
Buenas noticias y operación consistente con la estrategia del grupo. Iberdrola lleva varios años desarrollando este tipo de operaciones (partnership) consistentes en la venta de participaciones minoritarias, normalmente el 49%, en proyectos de renovables, tanto dentro como fuera de España.
Iberdrola se ha convertido en la energética mundial que más está exprimiendo este modelo de partnership, una fórmula mediante la cual incorpora a socios financieros a sus proyectos lo que le permite acelerar el crecimiento, cristalizar el valor de los activos y a la vez retener el control y la gestión. El éxito del modelo radica además en que Iberdrola ha sabido escoger socios de primer nivel, creando una especie de clúster de aliados afines a la empresa. En ese equipo ya están, además de Fortescue, Norges, Masdar, los fondos GIC y EIP, y los grupos BP y Mapfre.
Con Masdar, el gigante emiratí, Iberdrola cerró hace menos de un mes la venta del 50% del proyecto de eólica marina East Anglia 3 en Reino Unido. Esta alianza supone un refrendo al acuerdo alcanzado entre ambas firmas a finales de 2023 para coinvertir 15.000M€ en energías renovables en Estados Unidos, Alemania y Reino Unido. Con Norges, el fondo soberano noruego, Iberdrola acordó hace dos años la venta de una participación minoritaria de una cartera por más de 1.200M€. En 2024, pactó también con Norges un acuerdo de coinversión de 2.000M€ en España y Portugal.
Tras cristalizar valor en estos activos ya maduros en renovables, Iberdrola destinará la mayor parte de sus inversiones a futuro en redes. Iberdrola ha identificado oportunidades de inversión en redes que totalizan 55.000M€ para el periodo 2026-2031, lo que le permitirá llegar a una base de activos regulados (RAB) de 90.000M€ para 2031. Los retornos en redes son atractivos y muy visibles gracias a marcos regulatorios estables a largo plazo (ROE medio de 9,5%).