EEUU sigue en pleno empleo (3,7% de paro)

Naves EEUU

Ana Racionero (Intermoney) | Abríamos la última jornada de la semana pendientes del dato de nóminas no agrícolas, no sin antes conocer algunas cifras europeas. España perdía 40.428 empleos en el mes de agosto. Los PPI del conjunto de la UE crecían en julio un 4%, frente al 1.1% de junio y el 3.7% previsto. En versión interanual, el aumento era de un 37.9%, frente al 35.8% previo y el 37.3% esperado.

Conforme al índice Bloomberg bond index, los bonos globales ya habrían entrado en “bear market”, el primero de ellos en una generación, después de haber caído un 20% desde su pico en enero de 2021, debido a la presión de los bancos centrales de acabar con la inflación a golpe de subidas de tipos aún a costa de provocar una recesión. Los analistas de Citigroup ya apuestan porque las próximas dos subidas de tipos del BCE sean ambas de 75 pb puesto que, a su entender, un ciclo corto, rápido y agudo de endurecimiento monetario sería una base convincente y, desde luego, una subida de 75 pb en la próxima reunión sería el suelo. Esta visión, desde luego, coincidiría con la del ministro de finanzas austriaco, Magnus Brunner, quien, entre otras muchas voces críticas con la política monetaria del BCE, decía que Europa se estaría moviendo demasiado tarde y no estaría yendo lo suficientemente lejos con los precios. Otro factor a tener en cuenta es la debilidad del euro, que también favorecería una subida de 75 pb por parte del BCE el próximo jueves.

Por fin llegaba la hora de los “payrolls” que, tal y como vaticinaban los “jobless claims”, salían muy por encima de lo esperado (315k vs 297.5k) y, a pesar de que la cifra de paro ascendía del 3.5% al 3.7%, lo cierto es que EEUU sigue en cifras de pleno empleo, amén de que el aumento de la tasa de desempleo se debe a un mayor número de personas en búsqueda de trabajo a medida que se han ido retirando las ayudas derivadas de la pandemia de COVID, como se puede observar también en el aumento de la tasa de participación de la población activa, que subía al 62.4%. No obstante, la reacción del mercado era completamente “dovish”, y las compras de bonos se disparaban, ya que el mercado otorgaba más importancia al dato de ingresos medios por hora, que caía al 0.3%. A pesar de lo anterior, el mercado seguía arrogando más probabilidades a 75 pb que a 50 pb de subida en la reunión de la FED de septiembre. Las bolsas también ascendían, celebrando las buenas cifras de empleo y de ingresos por hora, puesto que la robustez del empleo valida la tesis de la FED de que la economía americana podrá soportar subidas de tipos adicionales. Los pedidos de fábrica caían en julio al -1.0% (del previo 1.4% y frente al 0.4% de las encuestas), y las órdenes de bienes duraderos al -0.1% (vs 0.0%). La reacción “dovish” del mercado después de las cifras americanas favorecía al euro, devolviendo al EURUSD por encima de la paridad.

El lunes próximo conoceremos quién será el nuevo PM del Reino Unido, que heredará un país sumido en una recesión, con una inflación que se prevé que llegue a alcanzar el 14% a lo largo de este año, y cuyo coste del nivel de vida más básico se ha encarecido un 20%, provocando el mayor recorte en el presupuesto de los hogares en una generación, lo que está generando un gran malestar social y huelgas diarias. La mala situación el país, la dependencia del capital extranjero, el aumento del coste de la deuda y el aumento de las probabilidades de que la independencia del BOE se vea circunscrita hacen cada vez más factible que se llegue a alcanzar la paridad de la GBP contra el USD.

El lunes también tendrá lugar la reunión de la OPEC, en la que previsiblemente se acordará reducir la producción, pese a los problemas de suministro globales y la presión en contra de EEUU. Pese a ello, la decisión del G7 de acordar un tope al precio del crudo ruso mantenía al WTI en el entorno de los 88 USD por barril.

Rusia, que estaría considerando un plan para adquirir este año 70000 millones de yuanes y otras divisas “amigas” a fin de contener la subida del rublo, lo que beneficiaba al yuan, parece dispuesta a reestablecer el flujo del suministro de gas el sábado, tal y como estaba previsto, lo que ayudaba a mantener el precio del gas.

La semana finalizaba con una bajada generalizada de las rentabilidades de los bonos, a excepción de los Gilts, lo que favorecía el estrechamiento de las primas de riesgo. El “yield” cedía en mayor medida en el corto plazo, lo que provocaba un empinamiento de las curvas. El EURIBOR se publicaba al 1.896%.