Intermoney | Los funcionarios del BCE ya no ven en los precios el mayor de sus problemas. Como afirmaba ayer el finés Oli Rehn, la desinflación en la zona euro “va bien encaminada”. Aunque no quería mojarse en cuanto a la velocidad y magnitud con la que el banco actuará en la próxima reunión, recalcando que esto dependerá de los nuevos datos. Pero sí dejó caer que los expertos del Banco de Finlandia estiman que la tasa natural en la zona euro está en el rango de 0,2-0,8%, lo que dejaría el tipo neutral nominal en el 2,2-2,8%. Cabe destacar que los funcionarios añadían a sus preocupaciones las posibles tensiones comerciales que pueda haber entre EEUU y la zona euro, y ahí Rehn advertía que Europa debe estar mejor posicionada para responder de lo que estaba durante el primer mandato de Trump. Por su parte, el austriaco Holzmann afirmaba que el BCE tendría que reaccionar si las políticas de Trump provocaran una mayor inflación, y una respuesta de la Reserva Federal que potencialmente acercara el tipo de cambio entre el euro y el billete verde a la paridad. Lógico, teniendo en cuenta que la hoja de ruta prometida se debería traducir en más inflación, un dólar más fuerte y menos bajadas de tipos.