¿Darán las nóminas cierto margen a la Fed?

Cartel feria del trabajo Estados Unidos

Intermoney | La presente semana será muy interesante en la esfera estadounidense por la publicación de las nóminas de junioLa moderadísima evolución a la baja de los payrolls no es suficiente para que los mensajes de la Reserva Federal dejen entrever el fin de las acciones restrictivas de política monetaria. Exceptuando el posicionamiento laxo de algún solitario miembro como el presidente de la Fed de Chicago, Austan Goolsbee, lo cierto es que los mensajes se caracterizan por no desistir en la lucha con la inflación. Para recordarnos la opinión ampliamente generalizada dentro del banco, el miércoles, la publicación de las actas del último encuentro del FOMC serán un reflejo de la idea común sobre la rigidez de la inflación subyacente, lo que respalda nuevos aumentos.

Muy interesante será conocer el debate sobre cuando se sentirá de manera plena el impacto total de 500 p.b. acumulados hasta la fecha. Desde IM pensamos que la idea es esperar a ver como los ajustes se van filtrando, siendo consecuentes que la resistencia de la economía estadounidense es una realidad y dificulta el trabajo, si bien más subidas no tienen porque ser necesariamente la solución. La importancia de los indicadores de la semana estará en que, en función de su sesgo, podremos confirmar una subida de tipos en julio que, por el momento y en base a la curva OIS, el mercado otorga una probabilidad del 82,5%.

Una vez dicho esto y con respecto a las nóminas, todo lo que no sea confluir con el consenso del Bloomberg o situarse por debajo de este no será tomado por bueno, aunque el ritmo de contratación se esté desacelerando. Hay que ser cautos con ciertos aspectos, pues la tasa de desempleo se verá muy influenciada por la subida de la tasa de participación. Otro aspecto interesante estará en comprobar si las horas trabajadas siguen minorando, porque esto jugará en contra del crecimiento del salario neto de los trabajadores, así como las contrataciones temporales para ayudas en trabajos, un dato que nos sirve para ver la evolución de la actividad y que estaba comportándose a la baja.

La semana será prolífica en lo que a información del mercado laboral estadounidense se refiere. La encuesta ADP de empleo de junio probablemente muestre un moderado goteo a la baja en la contratación de trabajadores (240.000). Más relevante será conocer las vacantes JOLTS de empleo para

el mes de mayo tras su inesperado repunte, aunque su resistencia casará con la idea de que se necesita una mayor disminución en las ofertas de trabajo, estando la clave en la proporción de vacantes con respecto a personas desempleadas. Sin embargo, el número de renuncias seguirá evolucionando a la baja y esto es una buena señal.

En cuanto al resto de indicadores, también será interesante comprobar los detalles que marcan con respecto al mercado laboral y las intenciones de contratación. Por ejemplo, en el ISM manufacturero que conoceremos el lunes para el mes de junio (47,1 pts); más allá de que continue en terreno contractivo y de que los nuevos pedidos no vayan a servir de apoyo, la visible caída en los pedidos pendientes de ejecución que pudimos ver en mayo nos permite adelantar que la subpartida de empleo moderará visiblemente. Algo parecido podemos ver en el ISM servicios también de junio (54,1 pts), si bien menos evidente.

Dentro de los indicadores adelantados como los ISM, otra subpartida a tener en cuenta es la relativa a los precios. Mercado laboral e inflación acaparan la atención por igual. El viernes pasado, frente al evidente paso atrás del PCE central de mayo (3,8% a.); el subyacente era más resistente como bien mostraba su lectura de +4,6% a. Había que resaltar un par de puntos interesantes como era la minoración en los precios de los bienes (+1,1% a. ), algo más contenido en los duraderos (+0,7% a.) por el efecto de los precios de los vehículos y, como aspecto más llamativo, el +5,3% a. en los servicios en parte por la evolución a la baja en los precios de los servicios de atención médica, alimentación y servicios financieros.

A pesar de que el PCE mostrase una evolución más comedida, tanto el ingreso personal como el ingreso personal disponible aumentaban un +0,4% m. en mayo debido a que el sólido informe de empleo apoyó el crecimiento de las compensaciones de los empleados (+0,5% m.), que sigue siendo el factor clave del empuje de los ingresos mensuales. Los recibos de transferencias aumentaron un 0,3 % m, lo que equivale a aproximadamente 1 mm. $, a medida que los pagos de Medicaid, Medicare y el Seguro Social aumentaron gradualmente.

La buena noticia es que el incremento del ingreso está siendo canalizado por el ahorro cuya tasa aumentaba al +4,6% a medida que los consumidores se vuelven más exigentes en sus hábitos de gasto. De hecho, el ligero aumento del gasto nominal en mayo reflejaba la dicotomía entre el gasto en servicios (+0,4% m.) y el de bienes (-0,5% m.). Dentro de los bienes, el gasto en vehículos automotores y repuestos (-3,0%) y gasolina y otros energéticos (-5,2%) fueron los factores que más contribuyeron a la disminución. Lo más interesante estaba en que en términos reales se estancaba y esto supone un punto positivo para la Reserva Federal.