El embargo del crudo y del carbón ruso serían para las economías de la UE como “pegarse un nuevo tiro en el pie”

Mercado petrolero- Rusia

J.J. Fdez- Figares (Link Securities) | Tal como esperábamos, los principales índices bursátiles europeos abrieron la sesión de ayer al alza para, poco a poco, girarse a la baja y entrar en pérdidas hasta que la positiva apertura de Wall Street les permitió recuperar lo cedido para cerrar el día con ligeros avances. La sesión en su conjunto fue tranquila, y ello a pesar de que el precio del crudo, variable cuyo comportamiento ha condicionado en muchas sesiones de este año la evolución de la renta variable, repuntó ayer con fuerza como consecuencia de las posibles nuevas sanciones contra Rusia que están estudiando implementar los países occidentales como castigo por las atrocidades que han llevado a cabo las tropas rusas en algunas poblaciones cercanas a la capital ucraniana, Kiev. Es más, el presidente de Francia, Macron, que está en plena campaña electoral -la primera ronda de las elecciones presidenciales francesas tendrán lugar el próximo domingo-, algo que no hay que olvidar al procesar sus declaraciones, llegó incluso a hablar ayer de la posibilidad de que los países de la Unión Europea (UE) decreten el embargo del crudo y del carbón ruso. El gran problema, para el que estamos convencidos de que Macron no tiene solución, es que sustituir los 3 millones de barriles de petróleo al día que compra la UE a Rusia no es factible en estos momentos. Unas sanciones de este tipo, y por eso se opone Alemania, serían para las economías de la UE como “pegarse un nuevo tiro en el pie”, algo que terminarían pagando sus ciudadanos vía una todavía más elevada y persistente inflación. Llama la atención, no obstante, que, a pesar del riesgo que todo ello representa para la economía europea, algo que sí se vio reflejado ayer en la fuerte caída que experimentó en el mes de abril el índice de confianza de los inversores de la Eurozona, que elabora la consultora Sentix , tanto la renta variable, con el sector del ocio y turismo a la cabeza, como la renta fija tuvieron ayer «un buen día”. 

En este sentido, señalar que el buen comportamiento de los precios de los bonos durante la sesión, algo para lo que no tenemos una explicación convincente, propició una sensible relajación de sus rentabilidades, propiciando el buen comportamiento en bolsa de los valores catalogados como de crecimiento, especialmente de los del sector de la tecnología. En la positiva evolución de este último sector también tuvo un papel determinante la noticia de que Elon Musk, el “mediático” fundador de Tesla, anunció ayer que había adquirido algo más del 9% de las acciones de Twitter (su cotización subió el 27% en el día), lo que le convierte en el mayor accionista de la red social. Esta apuesta de Musk por las redes sociales “calentó” el sector tecnológico estadounidense, que también se vio favorecido en su conjunto por el buen comportamiento de los ADRs de las compañías chinas, tras anunciar las autoridades del país asiático concesiones en el ámbito de la auditoria de las cuentas de estas compañías para evitar de este modo que sean excluidas de cotización en las bolsas estadounidenses. Fue precisamente el buen comportamiento del sector tecnológico, con los grandes valores del mismo a la cabeza, lo que permitió ayer a los principales índices estadounidenses cerrar la sesión al alza, con el Nasdaq Composite liderando las ganancias. 

Hoy esperamos una sesión tranquila, de escasa actividad, en la que los principales índices bursátiles europeos abrirán entre planos y/o ligeramente a la baja. Es factible que tanto la fortaleza del crudo y sus connotaciones inflacionistas, como la amenaza de enquistamiento de la guerra de Ucrania, cuyas negociaciones de paz se han visto negativamente afectadas por el descubrimiento de las mencionadas atrocidades cometidas por las tropas rusas, pesen negativamente en el ánimo de los inversores, al menos al comienzo de la jornada. 

Por lo demás, comentar que en la agenda macro del día de hoy destaca la publicación en la Eurozona, sus principales economías, el Reino Unido y EEUU de las lecturas finales de marzo de los índices adelantados de actividad de los sectores de los servicios, los PMIs y el ISM no manufacturero estadounidense. En principio, y como ya mostraron sus lecturas preliminares del mes, estos indicadores comienzan ya a reflejar el impacto negativo que, en la actividad privada, sobre todo de la Europa continental, está teniendo la guerra de Ucrania y las sanciones contra Rusia implementadas por los gobiernos occidentales. Será interesante comprobar si las lecturas finales de marzo muestran una mayor desaceleración del crecimiento mensual de la actividad de lo que lo habían hecho las preliminares. De ser así, ello confirmaría que, a medida que pase el tiempo, las economías europeas irán desacelerándose de forma progresiva.