La fuerte subida del precio del petróleo en la última semana hace temer que la alta inflación pueda no ser tan temporal como defienden los bancos centrales

barriles petroleo

J.J. Fdez- Figares (Link Securities) | En una sesión en la que el temor a la inflación volvió a adquirir protagonismo, los principales índices bursátiles europeos cerraron en su mayoría con ligeros avances, mientras que los estadounidenses lo hicieron de forma mixta, pero sin grandes variaciones. No ocurrió lo mismo con los bonos, cuyos precios se vieron presionados a la baja desde primera hora de la jornada, con el consiguiente repunte de sus rentabilidades. Ello fue consecuencia, entre otros factores, del fuerte incremento que ha experimentado el precio del petróleo en la última semana, que le ha llevado a situarse a su nivel más elevado desde 2018, algo que hace temer a los inversores que la alta inflación pueda no ser tan temporal como vienen defendiendo los bancos centrales y que pueda terminar afectando a la recuperación económica directamente, además de condicionar más de lo esperado las políticas monetarias, forzando a los bancos centrales a retirar sus estímulos antes de lo que sería deseable. 

A este hecho hay que sumar el incremento generalizado que está experimentando el precio de la electricidad, lo que está comenzando a crear graves problemas en algunos países, empezando por China. Así, ayer los inversores se levantaron con la noticia de que en algunas regiones de este país se ha tenido que detener la actividad de algunas fábricas, mientras los hogares se quedaban sin electricidad en un esfuerzo por cumplir con los objetivos oficiales de uso de energía. La segunda derivada de este problema es inquietante, ya que, si más fábricas chinas se ven obligadas a parar su actividad, ello podría aumentar los ya de por sí elevados problemas que afrontan muchas cadenas de suministros internacionales, generando nuevas presiones inflacionistas e, incluso, limitando las producciones de muchas compañías. 

Ayer mismo la presidenta del BCE, la francesa Lagarde, en su declaración introductoria en la audiencia de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, volvió a reiterar, en un evidente intento de calmar los ánimos, que la alta inflación tiene un carácter temporal, y que no hay signos de presiones al alza de precios generalizadas. Igualmente, el presidente de la Reserva Federal (Fed), Powell, en su intervención ante el Comité Bancario del Senado, al que acude hoy junto con la secretaria del Tesoro, Yellen, defenderá que el repunte de la inflación es temporal y que es consecuencia de los cuellos de botella en las cadenas de suministros y de los retos que conllevan la reapertura de las economías. No obstante, y según se recoge en su “declaración preparada”, que ya ha sido publicada, Powell sí reconoce que las presiones en los precios están siendo superiores y más duraderas de lo en principio esperado, pero que con el tiempo se reducirán y la inflación convergerá hacia el objetivo del 2%. Dicho esto, Powell también deja claro que la Fed actuará contra la inflación en caso de que sea necesario. 

Por tanto, la inflación ha vuelto a “entrar en juego” condicionando las decisiones de inversión de muchos inversores en los mercados de renta variable. Ayer el repunte de los bonos benefició claramente a las opciones de “valor” en las bolsas occidentales, especialmente al sector bancario, que sale favorecido inicialmente por el incremento de los tipos de interés a largo plazo. Así, los bancos junto con las compañías del sector de la energía fueron ayer lasos que mejor se comportaron en estas bolsas, mientras las compañías de “crecimiento”, especialmente las de los sectores tecnológico y de la sanidad (biotecnológicas), junto con los de corte defensivo, en este último caso especialmente en Wall Street, fueron los que sufrieron en mayor medida las ventas de los inversores. 

Hoy esperamos que la sesión comience entre plana y/o ligeramente a la baja en las bolsas europeas, en las que el nuevo repunte que está experimentando esta madrugada el precio del crudo creemos que volverá a acrecentar los temores de los inversores al impacto que la alta inflación puede terminar teniendo en la incipiente recuperación económica, algo que puede volver a presionar a la baja a los precios de los bonos e impulsar sus rentabilidades. De ser así, los bancos volverán a verse favorecidos, mientras que continuará la presión sobre las cotizaciones de las compañías de crecimiento. 

Por lo demás, comentar que en la agenda macro de hoy destaca principalmente la publicación en Alemania y Francia de los índices de confianza de los consumidores, correspondientes a los meses de octubre y septiembre, respectivamente, índices que pueden comenzar a reflejar también los temores de este colectivo a la alta inflación. Por la tarde, y como ya hemos anticipado, el presidente de la Fed, Powell, y la secretaria del Tesoro, Yellen, intervendrán ante un comité del Senado. Esperamos que ambos hablen, además de cómo ven la economía del país, de los riesgos que para la marcha de la economía estadounidense representa la lucha política que puede terminar provocando que el gobierno federal se quede sin recursos a finales de mes y que, a mediados de octubre, de no aumentarse el límite de endeudamiento, EEUU no pueda hacer frente a los pagos de su deuda, factores ambos que pueden provocar tensiones en los mercados financieros mundiales en el corto plazo.