CdM | La inflación de la Eurozona se modera en julio hasta el 5,3%, lo que supone un retroceso de dos décimas frente al mes anterior. De esta manera, la tasa general se coloca en mínimos de enero de 2022, mientas la subyacente se mantiene y no baja del 5,5%, según Eurostat, la oficina de estadística comunitaria.
En toda la Unión Europea (UE), la inflación se sitúa en el séptimo mes del año en el 6,1%, frente al 6,4% de junio. Se trata también de la menor subida de los precios desde enero de 2022.
En julio, la mayor contribución a la tasa de inflación interanual de la zona euro provino de los servicios (+2,47 puntos porcentuales), seguidos de alimentación, alcohol y tabaco (+2,2), bienes industriales no energéticos (+1,26) y energía (-0,62).
De esta manera, el coste de la energía descendió un 6,1%, frente a la bajada registrada del 5,6% en junio. Por su parte, los alimentos frescos se encarecieron un 9,2%, dos décimas más. Lo mismo que los servicios, cuya subida de precios es del 5,6%. Los bienes industriales no energéticos subieron un 5%, cinco décimas menos.
La inflación de los alimentos, alcohol y tabaco también disminuyó, hasta el 10,8% después del 11,6% de junio.
Por países, en comparación con junio, la inflación anual cayó en diecinueve Estados miembros, se mantuvo estable en uno y aumentó en siete. Las tasas anuales más bajas se registran en Bélgica (1,7%), Luxemburgo (2%) y España (2,1%). Por el contrario, las tasas anuales más altas tuvieron lugar en Hungría (17,5%) y Eslovaquia y Polonia (ambas con un 10,3%).