J. J. Fdez- Figares (Link Securities) | En una nueva sesión de elevada volatilidad, los principales índices europeos cerraron la jornada de ayer al alza, apoyándose en el buen comportamiento de sectores como el bancario y el de las utilidades, sectores que normalmente, y en función del comportamiento de los bonos, suelen moverse en sentido contrario. Sin grandes referencias en el ámbito macroeconómico, los inversores estuvieron ayer pendientes de los resultados trimestrales que publicaron varias compañías cotizadas, entre ellas Bankinter (BKT), cuyas cifras correspondientes el 1T24 fueron muy bien acogidas por el mercado al superar con cierta holgura lo esperado por los analistas y confirmar la buena marcha del negocio bancario en España, especialmente del margen de intereses, lo que, por el momento apunta a que el sector está siendo capaz de mantener sus márgenes, conteniendo el alza del coste de su pasivo.
En Wall Street en la sesión de ayer, un día más, y van 5 de forma consecutiva, los principales índices de este mercado empezaron la jornada al alza para terminar a la baja, cerrando todos ellos en negativo -el S&P 500 encadena cinco sesiones de pérdidas consecutivas-, con la excepción del Dow Jones, que lo hizo ligeramente al alza. El nuevo repunte de los rendimientos de los bonos -el bono con vencimiento a 2 años llegó a alcanzar el 5%, algo que no ocurría desde mediados del pasado mes de noviembre- fue un lastre para la renta variable. En esta ocasión, fueron las declaraciones de dos miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) del banco central estadounidense, el presidente de la Reserva Federal de Nueva York , Williams, y su homónimo de la Reserva Federal de Atlanta, Bostic, los que vinieron a enfriar el ánimo de los inversores, descartando potenciales bajadas de los tipos de interés oficiales en el corto plazo y, en el caso de Williams, llegando incluso a hablar de posibles alzas de los mismos, aunque señalando que no era su escenario base. Cabe señalar que, con la economía y el mercado laboral estadounidense mostrándose muy sólidos y la inflación reticente a bajar, es complicado que la Fed pueda comenzar a bajar sus tasas, algo que está forzando a muchos inversores a replantearse su estrategia.
Hoy no serán los tipos de interés los que centren la atención de los inversores, al menos de forma directa, inversores que deberán “procesar” las consecuencias que el ataque de represalia llevado a cabo por Israel esta madrugada contra varios objetivos militares iraníes, tanto en Irán como en Siria e Irak, puede tener en la estabilidad en la región, ya que abre la puerta a una guerra frontal entre ambas potencias. De ser así, podría tener consecuencias en la economía global, vía el incremento del precio del crudo, factor inflacionista que condicionaría la actuación de los bancos centrales, que se verían en la tesitura de tener que mantener sus tipos de interés a niveles restrictivos, con el consiguiente impacto en el crecimiento económico global. Por todo ello, esperamos hoy una apertura claramente a la baja de las bolsas europeas, que se comportarán en línea con lo acontecido esta madrugada en las bolsas asiáticas, que han cerrado todas ellas a la baja. El precio del petróleo, por su parte, repunta más del 2%, mientras que el dólar, actuando como refugio, se revaloriza contra el resto de principales divisas. Está por ver cómo se comportan los bonos; si prevalece su papel tradicional de activo refugio o los inversores interpretan que el escenario potencial de más inflación y tipos oficiales más altos durante más tiempo no es precisamente positivo para estos activos, que es lo que pensamos nosotros.
En momentos de incertidumbre como éste no suele ser bueno actuar de forma precipitada, al menos hasta disponer de más información, que permita aclarar el alcance real de lo acontecido para poder, de este modo, establecer potenciales escenarios de actuación. Es por ello que recomendamos prudencia y no actuar en caliente, ya que ello nos puede llevar a tomar decisiones de las que luego, con el paso de los días, nos podemos terminar arrepintiendo.