Renta 4 | Apertura bajista en bolsas europeas (futuros Eurostoxx -0,4%, futuros S&P 0,7%), con el trasfondo de un riesgo geopolítico al alza tras el ataque por sorpresa de Hamas a Israel que se ha traducido en una declaración oficial de guerra por parte del primer ministro israelí, y pendientes de las consecuencias que esto pueda traer. Los primeros efectos se dejan notar en el precio del crudo, que esta mañana ha llegado a avanzar +5%, hasta los 89 usd/b, ante temores de disrupciones en la oferta (Irán, con cerca de un 5% de la producción global de crudo, estaría detrás del ataque, según WSJ, a la vez que el conflicto supondría un golpe al acuerdo entre Israel y Arabia Saudita, 13% de la producción global-mediado por Estados Unidos). Asimismo, vemos a dólar (+0,4%) y oro (+1%) actuando como refugio. El T-bond, que también debería servir de refugio, cerrado por Columbus Day.
Todo esto ocurre después de un viernes marcado por un muy sólido informe de empleo americano, que mostró una fortísima aceleración en la creación de empleo (336.000 nóminas no agrícolas vs 170.000e y 227.000 anterior), a lo que se sumó una notable revisión al alza de los dos meses previos (+119.000). La tasa de paro se mantuvo estable en 3,8% (vs 3,7%e) y se mantiene la presión en salarios (+4,2% i.a. vs +4,3%e y anterior). La solidez mostrada por el mercado laboral americano genera dudas sobre la capacidad de moderar la inflación y devolverla a su objetivo del 2% y vuelve a presionar a la Fed para una subida adicional (probabilidad cercana al 40%). A pesar del repunte de TIRes, +6 pb el 2 años hasta 5,1% y +8 pb el 10 años hasta 4,8%, las bolsas subieron tomando en positivo la fortaleza del mercado americano y apostando por un buen IPC esta semana. Por su parte, el dólar, pese a apreciarse inicialmente con fuerza, llegando a tocar 1,048 vs euro, volvió posteriormente a los niveles previos al dato de empleo, 1,056 vs eur.
De cara a la semana que hoy comienza, las referencias macro más relevantes serán los datos de inflación de septiembre en EEUU (jueves), en China (viernes) y los datos finales en la Eurozona y principales países. En Estados Unidos el dato general podría moderarse en tasa mensual (+0,3%e vs +0,6% anterior) e interanual (+3,6%e vs +3,7% previo), mientras que la subyacente podría mantenerse estable en tasa mensual (+0,3%e, en línea con el anterior) y seguir moderándose en interanual (+4,1%e vs +4,3% previo). En lo que respecta a China, el mercado espera que el IPC se mantenga estable (+0,2%e i.a. vs +0,1% anterior) y que el IPP modere la caída (-2,4%e i.a. vs -3% anterior).
Por el lado de los indicadores más adelantados de ciclo, destacamos algunas referencias de confianza: la que elabora la Universidad de Michigan sobre los consumidores, cuya lectura preliminar de octubre podría mostrar estabilidad en niveles bajos (presión por menor renta disponible ante subida de tipos y costes energéticos y agotamiento del ahorro acumulado durante la pandemia) y la de los inversores en Europa (Sentix, que se conocerá hoy y seguiría deprimida en el actual escenario de estanflación).
En Estados Unidos también se publicarán las Actas de la Fed (miércoles), cuya última reunión (20-septiembre) trajo un aumento del “dot plot” para 2024-25 a pesar de la pausa en la subida de tipos, un reflejo de su discurso “hawkish”.
En China destacamos los datos de balanza comercial de septiembre (viernes), de los que se espera una caída menos intensa tanto de las exportaciones como de las importaciones, aunque reflejando aún una débil demanda tanto interna como del resto del mundo.
Sobre datos de actividad, lo más relevante será la producción industrial de agosto en Alemania (hoy) y Reino Unido, que podrían seguir retrocediendo, aunque en menor medida que en el mes anterior.
Además de las referencias macro, esta semana comienza la temporada de publicación de resultados 3T23 en Estados Unidos. Aunque de momento sólo un número escaso publicará, tendremos algunas compañías relevantes, principalmente del sector financiero. En concreto, el viernes anunciarán sus cuentas Wells Fargo, Citigroup y JP Morgan.
Recientemente hemos publicado nuestra Visión de Mercado de septiembre, en la que reiteramos nuestra cautela en un contexto de desaceleración económica (con creciente brecha a favor de Estados Unidos y en contra de Europa y China) pero con una inflación aún lejos del objetivo del 2% de los bancos centrales (que no se espera alcanzar hasta 2025). Este escenario viene a reafirmarnos en nuestra idea de que, aunque el fin de las subidas de tipos esté próximo, el inicio de las bajadas se hará aún esperar y su cuantía será menor de lo previsto inicialmente, tal y como ha confirmado la Fed con la revisión al alza de su “dot plot”. Este escenario de tipos altos por más tiempo seguirá pesando sobre el ciclo económico y, previsiblemente, sobre los beneficios empresariales. Si bien es cierto que se ha producido un giro al alza en las revisiones de BPA 2023, especialmente en EE.UU. de la mano del aumento de probabilidades de aterrizaje suave, queda por ver si la evolución del ciclo a futuro permite cumplir con las expectativas de BPAs para 2024, que podrían resultar un tanto exigentes.