Unas condiciones crediticias más restrictivas llevarán inevitablemente a una mayor ralentización económica

Banca March | La Fed ayer ejecutó la novena subida consecutiva de tipos de este ciclo, aumentando el tipo oficial en 25 p.b. hasta el rango del 4,75% – 5%. En la rueda de prensa el tono de Powell señalizó la cercanía de la pausa, hasta tal punto de que no se hacen alusiones explicitas a subidas de tipos en el comunicado de prensa, por lo que si nos atenemos a lo marcado en el mapa de puntos, que es un 5,1% como tipo mediano esperado para 2023, quedaría por delante únicamente una subida de tipos de 25 p.b., posiblemente en la reunión de mayo. El gobernador de la Reserva Federal, tras reafirmar su compromiso con la estabilidad bancaria, justificó la cautela en esta reunión debido a la incertidumbre que entrañan la quiebra de 3 instituciones financieras americanas en menos de dos semanas. En este sentido, el comité considera que la crisis en los bancos regionales podría endurecer las condiciones de crédito, algo que contribuye a la tarea de control inflacionista de la Fed – enfriar la demanda agregada para controlar la espiral de subida de precios –, por lo que tensionar más las condiciones financieras, sin entender bien los efectos de la reciente crisis bancaria, sería innecesario. 

Por nuestra parte, pensamos que la reunión de ayer marca un punto de inflexión en la política monetaria y acerca la pausa al mes de mayo. No obstante, la incertidumbre acerca de los efectos en la economía de la quiebra de los bancos regionales sigue siendo elevada y pensamos que unas condiciones crediticias más restrictivas inevitablemente llevarán a una mayor ralentización económica en 2023.