Renta 4 | Apertura plana en Europa (futuros Eurostoxx 0%) y con ligeras alzas en los futuros americanos (+0,3%). De fondo, continúa el conflicto en Oriente Medio, con fuego cruzado entre Israel e Irán que mantiene el riesgo de escalada en los próximos días, con impacto en infraestructuras energéticas clave (hoy Brent +1% a 75 usd/b tras subir un 7% el viernes) y riesgo sobre las rutas de suministro (Estrecho de Ormuz que concentra un tercio del crudo y gas comercializados por vía marítima.) La reunión de ayer entre Estados Unidos e Irán para avanzar en su acuerdo nuclear fue suspendida. Asimismo, los líderes del G7 se reúnen hasta el martes en Canadá con dos focos principales de atención: el geopolítico y el comercial. Ambos factores podrían elevar la volatilidad de los mercados en los próximos días.
En el plano macro, en China hemos conocido importantes datos de mayo que muestran mejora en el consumo privado, pero debilidad en manufacturas y sector inmobiliario: ventas al por menor +6,4% (vs+4,9%e y +5,1% anterior), producción industrial +5,8% (vs +6,0%e y +6,1% anterior) einversión en propiedades -10,7% (vs -10,5%e y -10,3% anterior), mientras que los precios de viviendas aceleran su caída (tanto nuevas como usadas). Sin embargo, el avance en consumo podría deberse a factores no sostenibles (adelanto de festival de compra, subvenciones al consumo), por lo que habrá que esperar a próximos datos para confirmar esta mejora.
De cara al resto de la semana, en Estados Unidos se publicarán datos de ventas minoristas y producción industrial de mayo, así como las encuestas manufactureras adelantadas de junio de Nueva York (hoy lunes) y Filadelfia, y el índice de indicadores líderes. Todos estos datos permitirán calibrar el estado de la economía americana tras los últimos datos mixtos de empleo e inflación, y ajustar las expectativas sobre el calendario de recortes de tipos.
En Europa, lo más destacado será el dato final de inflación de mayo en la Eurozona (preliminares 2,2% general y 2,3% subyacente), así como el índice ZEW de confianza inversora en Alemania y la Eurozona, y la confianza consumidora de la Eurozona, que podrían mejorar.
En Japón, se anunciará el IPC de mayo (3,5%e vs 3,6% anterior en tasa general, 3,2%e vs 3% previo subyacente).
En materia de política monetaria, tendremos varias reuniones de bancos centrales, entre las que destacamos Banco de Japón (martes), Fed (miércoles) y Banco de Inglaterra (jueves). Si bien no esperamos cambios en esta semana, el foco de atención más inmediato estará en el coste de la energía, que podría complicar la labor de los bancos centrales a futuro en caso de producirse una subida sostenida por motivos geopolíticos.
De cara a las reuniones de esta semana, no esperamos cambios por parte del Banco de Japón (0,5%,) aunque los niveles de inflación sí avalarían una nueva subida de tipos (+25 pb), aunque más avanzado el año. También esperamos que la Fed mantenga tipos (4,25%–4,5%), a la espera de ver el impacto de los aranceles en crecimiento (a la baja) e inflación (al alza), y con un mercado que sigue descontando 2 recortes de 25 pb después del verano. En la misma línea, esperamos que el Banco de Inglaterra mantenga tipos (4,25%), con el mercado también descontando 2 recortes de 25 pb en el caso británico para después del verano.
En cuanto a nuestra visión de los mercados, después de haber incrementado nuestra exposición a Estados Unidos tras la corrección del “Liberation Day” y aunque seguimos constructivos en renta variable a largo plazo ante la previsible ausencia de recesión global, a más corto plazo nos mantenemos cautos ante unos mercados que prácticamente han vuelto a máximos históricos tanto en Estados Unidos (-2% en S&P 500 y -1% en Nasdaq), como en Europa (-5% Eurostoxx) pese a la cantidad de riesgos que se mantienen latentes (comercial, geopolítico) y podrían devolver volatilidad al mercado.
Los próximos 30 días deberían arrojar más luz sobre la situación arancelaria a nivel global (9 julio fin negociaciones comerciales), con sus previsibles efectos negativos sobre crecimiento e inflación y, por derivada, sobre beneficios empresariales y valoraciones. En este sentido, si bien las estimaciones de BPA para 2025 se han venido revisando a la baja tanto en Estados Unidos (-3 pp, de +12% a +9%) como en Europa (-3 pp, de +7% a +4%), un escenario macro más complejo podría continuar provocando revisiones y profit warnings, incrementando la sobrevaloración de Wall Street y/o provocando una recesión de beneficios empresariales en Europa.
Por el lado positivo, el mercado laboral americano continúa mostrando resiliencia pese al deterioro de las expectativas, y los malos soft data (encuestas) continúan sin reflejarse de manera concluyente en los hard data (datos reales). Además, no debemos olvidar los impactos positivos esperados por lo menores precios de la energía y las reducciones de impuestos y carga regulatoria.
Por su parte, en Europa, la materialización de los planes de inversión en defensa e infraestructura y la consecución de acuerdos comerciales con Estados Unidos podrían continuar apoyando los mercados.