Nvidia (-3% en mercados fuera de hora) decepciona ligeramente en su guía de ventas, aunque ante unas expectativas exigentes

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Renta 4 | Apertura plana (futuros Eurostoxx 0%, S&P 500 -0,1%, Nasdaq -0,3%) tras unos resultados de Nvidia después del cierre americano que decepcionaron ligeramente en la guía de ventas respecto a unas estimaciones muy optimistas (especialmente en centros de datos) y llevan a un -3% en la cotización en los mercados fuera de hora. Aun así, su CEO sigue esperando una demanda alta, aunque con cierta desaceleración después del boom de gasto en IA de los últimos dos años. El principal punto negativo sigue siendo la incertidumbre sobre las ventas de chips H20 a China, que siguen bloqueadas por temas geopolíticos aunque se espera que se reanuden (a cambio de un 15% de los ingresos para el gobierno estadounidense).

En Japón, subasta de deuda a 2 años con la menor demanda en 16 años (bid-to-cover 2,84x vs  4,47x anterior y 4x de media del último año), ante el temor a una nueva subida de tipos por parte del Banco de Japón este año.

Para la jornada de hoy, en el plano macro destacamos la primera revisión del PIB 2T25 en EE.UU., donde recordamos que la lectura preliminar mostró una recuperación (+3% i.t. anualizado vs -0,5% en 1T25) al no recoger ya el impacto negativo del adelanto de compras en el primer trimestre del año para evitar los aranceles. Aún así, el componente de consumo privado siguió mostrando cierta debilidad (+1,4% vs +0,5% en 1T). En la revisión primera que se publica hoy se espera ligera mejora respecto a las lecturas preliminares, hasta PIB +3,1% y consumo privado +1,6%.

De ayer destacamos también el peor comportamiento de índices como el italiano Ftse MIB (-0,72%) ante los rumores de un nuevo impuesto a la banca (1.500 millones de euros) con el objetivo de proporcionar ingresos al gobierno italiano que permitan financiar recortes de impuestos previstos para 2026. Esta noticia provocó cierto contagio a los bancos españoles (-2% en promedio), que lideraron las caídas del selectivo Ibex (-0,65%), aunque también en un movimiento de lógica toma de beneficios tras las fuertes revalorizaciones experimentadas en lo que llevamos de año, y con un trasfondo de limitadas preocupaciones por las caídas de deuda francesa (no contagiadas a la deuda española) y tipos de interés (el BCE mantiene su actitud de dejar los tipos de intervención sin cambios en el resto del año tras la fuerte rebaja ya acometida, -200 pb hasta un tipo de depósito actual del 2%).

En el plano político, los problemas no se limitan a Francia (cuya prima de riesgo se sitúa ya en 82 pb, a sólo un 5% de su máximo anual vs -20% en el caso de España o -30% en Italia y Portugal, y con el riesgo adicional de una rebaja de rating cuando Fitch revise la calificación francesa el 12-septiembre y en caso de que no haya avances en la consolidación fiscal que permitan alcanzar el objetivo de 4,6% déficit público/PIB), sino que en Países Bajos también habrá una moción de confianza al gobierno del primer ministro Schoof, un gobierno ya interino tras el colapso en junio de la coalición de cuatro partidos, y que actualmente cuenta sólo con dos partidos y una minoría cada vez más pequeña (32/150 escaños) ante divergercias sobre temas varios (Israel, inmigración). Esta situación, de no resolverse, podría llevar al país a una crisis política sin precedentes. Aunque hay elecciones previstas para octubre, la elevada fragmentación política dificulta la formación de un gobierno estable.

La inestabilidad política europea (Francia, Países Bajos), junto a la debilidad de Alemania, complica los esfuerzos de la UE para hacer frente a los aranceles americanos (el ministro de comercio holandés también ha dimitido) y apoyar los esfuerzos de paz para Ucrania.

En cuanto al dólar, el intervencionismo de Trump en la Fed con el intento de destituir a Lisa Cook no está teniendo un impacto depreciador (1,164 vs euro) tras la decisión de Cook de plantar batalla legal contra las acusaciones del presidente de EE.UU., a la vez que el euro se ve en cierta medida presionado por la difícil situación política de Francia.

Mientras tanto, en el plano comercial, la UE intentará sacar adelante por la vía rápida (para finales de semana) la legislación necesaria para eliminar todos los aranceles a los productos estadounidenses, una de las peticiones principales de Trump para a su vez reducir los aranceles sobre las exportaciones de automóviles europeos (del 27,5% actual al 15%). Por el contrario, la UE no parece dispuesta a ceder en lo que respecta a las tasas sobre los servicios digitales que afectan a grandes tecnológicas americanas.