Intermoney | Como preludio del encuentro de la Reserva Federal de hoy, el martes conocimos un último dato
del mercado laboral. Concretamente, las vacantes de empleo de octubre aumentaron hasta los 7,67 millones, muy por encima de los 7,12 que estimaba el consenso de Bloomberg, aunque había matices que restaban bastante peso a la cifra general. La menor contratación y el aumento de despidos dan a entender una imagen algo más débil del mercado laboral. Por un lado, el número de despidos en octubre subió a 1,85 millones, el nivel más alto desde comienzos de 2023, siendo los sectores de ocio y hostelería, así como en la industria manufacturera donde
veíamos los mayores recortes de plantilla.

Por otro lado, otro síntoma de la desaceleración del mercado laboral la vemos de nuevo en la poca disposición a contratar, ya que ésta descendió desde septiembre en 218.000. En sectores como la construcción y las manufacturas hemos visto un descenso reseñable que intuíamos dada la mayor fragilidad de esos sectores. Aunque más llamativo nos parecía la caída de las contrataciones en servicios profesionales, educativos y asistencia sanitaria. Apuntando en la misma línea, la confianza de encontrar otro empleo para los trabajadores actuales está en un terreno demasiado bajo, y eso explica que la tasa de los que renunciaron a su empleo se situara
en el 1,8% (desde el 2,0% anterior), el nivel más bajo desde el comienzo de la pandemia.

En lo que eran las propias vacantes, frente al mes anterior apenas había variaciones, puesto que las cerca de 25.000 vacantes extra que veíamos en el sector privado se compensaban con las 25.000 menos en el empleo federal, algo más que lógico si tenemos en cuenta que fue el mes en el que se producía el cierre del gobierno. Dentro de las vacantes del sector privado, tampoco nos sorprendía que servicios sanitarios siguieran contribuyendo al alza como ha venido siendo habitual. Esta vez se unían al transporte, comercio y utilities, que eran otra de las principales generadoras de vacantes.