François Rimeu (Crédit Mutuel AM) | Es poco probable que el mensaje del Banco Central Europeo (BCE) cambie de forma significativa en su próxima reunión de esta semana. Se espera que el BCE mantenga su política monetaria sin cambios y repita un mensaje similar al de reuniones anteriores.
Las recientes declaraciones de Isabel Schnabel, miembro del consejo del BCE, han reforzado la opinión de que es muy improbable que se produzca una bajada de tipos a corto plazo: parece bastante cómoda con las expectativas actuales del mercado (que no apuntan a cambios en los próximos 12 meses, e incluso a una baja probabilidad de subida de tipos).
Nuestras expectativas para esta reunión:
- El tipo de interés de la facilidad de depósito debería mantenerse en el 2 %, respaldado por un crecimiento resistente y una inflación controlada.
- Se espera que Christine Lagarde modere las expectativas del mercado con respecto a una posible subida de los tipos en 2026.
- Para ello, es probable que se base en las nuevas proyecciones macroeconómicas del BCE.
- Estas proyecciones deberían apuntar a un escenario de crecimiento mejor de lo esperado tanto para 2025 como para 2026, pero sin indicar presiones inflacionistas en el horizonte 2026-2027.
- En última instancia, Christine Lagarde debería reiterar el mensaje de que el BCE continuará con su enfoque de ir «reunión a reunión», ajustando la política en función de los datos disponibles.
Conclusión:
Se espera que el BCE apunte a un escenario de crecimiento mejor de lo previsto hace tres meses y confirme que la política monetaria se encuentra actualmente en una «buena» posición. Es poco probable que persista la anterior postura moderada. Dado que los mercados han descontado en gran medida las declaraciones de Isabel Schnabel, cualquier respuesta tras la reunión del BCE debería ser limitada. Sin embargo, a largo plazo, creemos que las expectativas monetarias actuales son demasiado altas, teniendo en cuenta el potencial de crecimiento de la zona euro.



