El proceso de “desinflación” se encarrila en EEUU, en Europa se verá en los próximos meses, pero los bancos centrales no quieren “lanzar las campanas al vuelo”

Bancos_Centrales_Fed_BCE

J.J. Fdez- Figares (Link Securities)| Un nuevo y positivo dato sobre la evolución de los precios en EEUU, en esta ocasión de los de fábrica, impulsó con fuerza al alza por segundo día de forma consecutiva tanto a los bonos como a las acciones europeas y estadounidenses. De este modo, los principales índices bursátiles europeos cerraron la jornada con importantes avances, cerca de sus niveles más altos del día, mientras que los estadounidenses, que perdieron algo de fuelle durante las últimas horas de la sesión, también lo hicieron con ganancias, con el S&P 500 superando el nivel de los 4.500 puntos por primera vez desde el mes de abril de 2022. Tanto este índice como el Nasdaq Composite volvieron a cerrar en sus niveles más elevados en 12 meses.

Si bien en Europa las bolsas comenzaron la jornada con algunas dudas, con algunos de sus principales índices abriendo el día con ligeros descensos, poco a poco, estos mercados se fueron girando al alza, alcanzando sus índices los niveles más elevados del día tras la publicación en EEUU del índice de precios a la producción (IPP) de junio, cuya lectura sorprendió positivamente, al situarse tanto la tasa de crecimiento del IPP general como la de su subyacente por debajo de lo esperado por los analistas. Es más, el IPP general subió en junio el 0,1% en tasa interanual, su menor avance desde el 2020, cuando, poco después del inicio de la pandemia, este indicador de precios llegó a descender en términos interanuales. Las lecturas estuvieron en línea con las que se están publicando en los últimos meses en las principales economías desarrolladas. En la fuerte ralentización del crecimiento de los precios industriales están “jugando a favor” i) los descensos de los precios de la energía y de las materias primas; ii) los cada vez menores problemas en las cadenas de suministro globales y iii) la debilidad de la demanda. Éste último factor es quizás el más preocupante, ya que no tiene visos de ir a mejor en los próximos meses.

Si bien el proceso de “desinflación” parece encarrilado en EEUU, algo que esperamos ocurra también en Europa en los próximos meses, lo que apuntala el escenario de un “aterrizaje suave” de estas economías, muchos miembros de los bancos centrales siguen pensando que es pronto para “lanzar las campanas al vuelo”. Ayer mismo se pudo comprobar que es así tanto al analizar las actas de la reunión que mantuvo el junio el Consejo de Gobierno del BCE, como al escuchar a dos miembros importantes del banco central estadounidense. Así, en las mencionadas actas se puede comprobar como algunos miembros del Consejo abogaron en la reunión por una subida de tasas de medio punto porcentual en lugar de la de 25 puntos básicos que fue finalmente aprobada. Por su parte, ayer mismo, tanto uno de los gobernadores de la Reserva Federal (Fed), Waller, como la presidenta de la Reserva Federal (Fed) de San Francisco, Daly, tras “celebrar” los datos de la inflación de junio en EEUU, abogaron por ser prudentes y por continuar subiendo las tasas de interés de referencia. En este sentido, reiterar que creemos que tanto el BCE como la Fed volverán a subir sus tasas de referencia a finales de julio y que es muy probable, en el caso del BCE lo consideramos casi una certeza, que lo vuelvan a hacer a finales del verano. Los inversores parecen más optimistas al respecto, sobre todo en lo que hace referencia a la Fed, ya que parecen convencidos, y así están actuando, de que la de julio será la última subida de tipos llevada a cabo por el banco central estadounidense del ciclo actual.

Sobre las intenciones de ambos bancos centrales sabremos más cuando celebren las reuniones de sus respectivos comités de política monetaria a finales de mes. Hasta entonces la atención de los inversores girará, para centrarse en los resultados trimestrales de las cotizadas. En ese sentido, señalar que ayer dos importantes compañías en sus respectivos sectores de actividad, Delta Air Lines (DAL-US) y PepsiCo (PEP-US), dieron a conocer sus cifras. En ambos casos las compañías superaron con suficiencia lo esperado por los analistas y, lo que es más importante, revisaron al alza sus expectativas de resultados para lo que resta del ejercicio. Si bien la reacción inicial de los inversores fue muy positiva, con las acciones de las dos compañías subiendo con fuerza en operaciones antes de la apertura del mercado, tras la apertura del mismo, y poco a poco, las alzas fueron perdiendo fuerza, llegando incluso Delta Air Lines (DAL-US) a cerrar el día con ligeros descensos. Independientemente de la reacción puntual de los inversores de ayer, nosotros nos quedamos con el hecho de los gestores de ambas compañías se mostraron optimistas sobre el devenir de sus negocios en lo que resta de ejercicio, hecho éste que es el que creemos que se debe valorar cuando las cotizadas den a conocer sus cifras en las próximas semanas.

Hoy mismo tres de las grandes entidades de crédito estadounidenses: JP Morgan (JPM-US), Wells Fargo (WFC-US) y Citigroup (C-US), darán a conocer sus resultados correspondientes al 2T2023. Habrá que estar muy pendientes de la evolución de sus márgenes de intermediación para comprobar hasta qué punto se ha elevado el coste del pasivo de las entidades, así como también a la evolución de los depósitos, aunque este es un problema que afecta en mayor medida a los bancos medianos (regionales) del país, y a la evolución de la morosidad, partida que debe ir a más como consecuencia de las subidas de tipos de interés. Igualmente, habrá que analizar el comportamiento en el periodo de la banca de negocios y de los ingresos por intermediación de estas grandes entidades, especialmente en el caso de JP Morgan (JPM-US), que está más expuesto a estos negocios. También será clave lo que digan los gestores de estos bancos sobre el devenir de la economía de EEUU y de sus negocios en los próximos trimestres. Todo ello puede determinar la tendencia de cierre semanal de las bolsas europeas y estadounidenses.

Para empezar, y tras los fuertes repuntes experimentados en los últimos días, esperamos que hoy las bolsas europeas abran planas o ligeramente a la baja, con los inversores a la espera de conocer las cifras que presenten los bancos estadounidenses y las expectativas de negocio que transmitan sus gestores. En ese sentido, señalar que la mayoría de los principales índices bursátiles europeos se enfrentan en estos niveles a fuertes resistencias que no han podido superar en intentos precedentes. Para ello, necesitarán de nuevos catalizadores y una positiva temporada de resultados podría ejercer como tal.