El temor a una entrada en recesión eleva los rendimientos de los bonos y se lleva los beneficios de las bolsas: el Nasdaq, a punto de entrar en recesión técnica

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Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | Ayer continuó la presión vendedora en los mercados de valores europeos y estadounidenses, cuyos principales índices cerraron el día con sensibles descensos, descensos que fueron más pronunciados en Wall Street, mercado que tuvo ayer una de sus peores sesiones de los últimos meses. Detrás de esta debilidad de la renta variable, que ha llevado a sus principales índices a ceder en muchos casos más del 7% desde sus máximos de julio –el Nasdaq Composite ya ha perdido el 9% y está a punto de entrar en lo que se cataloga como corrección técnica, fase que tiene lugar cuando se cede más del 10% desde los recientes máximos-, está el fuerte repunte de los rendimientos de los bonos, concretamente de los de vencimiento a más largo plazo, factor que penaliza en bolsa, sobre todo, a las compañías más endeudadas, a las catalogadas como de crecimiento, ya que lastra sus valoraciones, y, también, a las que ofrecen elevadas rentabilidades por dividendo, las cuales compiten directamente con los bonos por el favor de los inversores.

Como señalábamos ayer, el mensaje lanzado recientemente por los bancos centrales de que los tipos de interés oficiales se mantendrán más tiempo del inicialmente previsto a niveles restrictivos, mensaje que han seguido reiterando en los últimos días varios miembros de los distintos comités de política monetaria de dichos bancos centrales, ha calado profundamente en el ánimo de unos inversores que temen que las autoridades monetarias, con sus políticas monetarias agresivas, acaben provocando la entrada en recesión de las principales economías desarrolladas. Ayer mismo el hecho de que la confianza de los consumidores estadounidense bajara nuevamente en el mes de septiembre fue muy mal recibido por los inversores, al entender que la alta inflación y los altos tipos de interés están comenzando a pasar factura a los consumidores estadounidense los cuales, hasta el momento, se habían mostrado muy resistentes, lo que puede terminar lastrando el crecimiento de esta economía. Ayer, por tanto, “las malas noticias” macroeconómicas sí fueron “malas” noticias para los mercados.

Además, ayer en Wall Street entró en juego un nuevo factor. Así, por la tarde se supo que la Comisión Federal de Comercio había denunciado ante los tribunales a Amazon (AMZN-US) por lo que considera prácticas monopolísticas que obstaculizan la competencia y aumentan los precios para los compradores en sus mercados online. Si bien la batalla en los tribunales de justicia será larga e incierta, esta noticia penalizó ayer el comportamiento no solo de las acciones de la compañía en cuestión, sino de todas las grandes empresas tecnológicas, ya que a muchas de las ellas la citada Comisión las tiene en su “punto de mira”. De este modo, el negativo comportamiento de los grandes valores tecnológicos, que mantienen una muy elevada ponderación en los índices, fue también ayer uno de los principales motivos que arrastró a la baja con fuerza a la bolsa estadounidense.

Hoy, en principio, creemos que es factible que asistamos a un intento de rebote en las bolsas europeas y estadounidense, ya que muchos valores y los índices se muestran muy sobrevendidos. No obstante, el posible “éxito” de este intento dependerá en gran medida del comportamiento de los bonos -ayer se estabilizaron algo tras las fuertes caídas que han registrado en las últimas sesiones, caídas que han llevado a sus rendimientos a alcanzar máximos multianuales-, y del dólar, variable ésta que con su fortaleza también se está convirtiendo en un lastre para las bolsas mundiales.

Para empezar la sesión de hoy, esperamos que los principales índices bursátiles europeos abran entre planos o con ligeros descensos, muy pendientes de la evolución de los futuros de los índices estadounidenses, que viene esta madrugada ligeramente al alza. Posteriormente, será el comportamiento de estos índices, de los bonos, del dólar y, también, del precio del crudo, lo que determinará si las bolsas siguen corrigiendo o si fructifica un potencial intento de rebote.

Por lo demás, señalar que en la agenda macroeconómica del día de hoy destaca la publicación en Alemania del índice que elabora la consultora GfK y que mide la confianza de los consumidores, en este caso de cara al mes de octubre; del mismo índice pero que elabora el INSEE para Francia y correspondiente al mes de septiembre; y por la tarde en Estados Unidos de la lectura preliminar de agosto de los pedidos de bienes duraderos. Todos estos indicadores y datos macro servirán a los inversores para ir haciéndose una idea de cómo pueden evolucionar las principales economías desarrolladas en los próximos meses.