J.J. Fdez- Figares (Link Securities) | Una sesión más, la guerra de Ucrania condicionó ayer el comportamiento de los mercados financieros europeos y estadounidenses, lastrando principalmente la evolución de la renta variable. Así, y como consecuencia del conflicto, el precio del crudo registró un fuerte incremento durante las primeras horas de la sesión de ayeren Europa, llegando a superar los $ 116 por barril en su variante WTI, nivel que no alcanzaba desde el mes de septiembre de 2008. Este factor mantuvo a los principales índices bursátiles de la región en negativo durante muchas horas. No obstante, y en un momento dado, las expectativas que se estaban generando alrededor de la reunión que por la tarde iban a mantener delegaciones rusas y ucranianas en Bielorrusia provocaron un giro al alza de estos índices, con algunos de ellos llegando incluso a ponerse en positivo. A ello también contribuyó el hecho de que el precio del crudo se giró a la baja sin motivos aparentes, aunque creemos que ello fue debido en gran medida a las tomas de beneficios por parte de algunos inversores.
Sin embargo, durante las últimas horas de la sesión, las bolsas europeas se volvieron a girar a la baja, cerrando sus principales índices con fuertes caídas y en los niveles más bajos del día. Entendemos que el enfriamiento de las expectativas de que era factible de que ambas partes llegaran a un acuerdo de alto el fuego en Ucrania y la intensificación de los ataques indiscriminados rusos a varias ciudades ucranianas fue la principal razón que animó a los inversores a volver a deshacer posiciones en renta variable. En las bolsas europeas únicamente el sector de materias primas minerales acabó en positivo, apoyándose en el fuerte incremento que registró ayer el precio del carbón, mientras que el sector más penalizado por las ventas fue el del ocio y turismo, con las aerolíneas liderando las caídas.
En Wall Street la sesión fue parecida, aunque los índices experimentaron descensos sensiblemente inferiores a los europeos. En este sentido, cabe destacar que estos últimos, tras mantener un comportamiento relativo sensiblemente mejor al de los estadounidenses durante los primeros meses del año, ya han perdido dicha ventaja, posiblemente al estar las economías y las empresas europeas mucho más afectadas directa e indirectamente por el conflicto armado en Ucrania por su mayor ligazón con Rusia. Así, son muchas las empresas de la Unión Europea (UE) con exposición directa o indirecta al mercado ruso, exposición que se ha convertido en un lastre para sus intereses en la última semana, sobre todo a raíz de la imposición de las duras sanciones económicas a Rusia por parte de los gobiernos de la región, sanciones que dejan en el limbo muchas de las inversiones realizadas en este país por las compañías europeas.
Posteriormente, Ucrania anunció que no había obtenido el resultado esperado en la segunda ronda de conversaciones con Rusia, pero accedió a celebrar otra ronda de conversaciones, ronda que tendrá lugar la semana que viene. No obstante, sí se acordó un mecanismo humanitario y de socorro en casos de desastre que podría incluir un alto el fuego temporal y corredores humanitarios. Cabe también destacar que el presidente de Francia, Macron, tras mantener una nueva conversación de más de una hora con su homólogo ruso, Putin, vino a decir que éste no estaba por la labor de frenar el ataque y que su objetivo era no parar hasta hacerse con el control total de Ucrania. Macron llegó a afirmar que creía que “lo peor está aún por llegar” en referencia a la guerra ucraniana.
Esta madrugada los inversores en Asia se han tenido que enfrentar a una noticia realmente alarmante, que muestra una vez más la irracionalidad con la que está actuando Rusia, especialmente su presidente, que es el principal responsable de lo que está ocurriendo. Así, y según informes de Associated Press, la planta de energía nuclear en la ciudad de Enerhodar, en el sur de Ucrania, ha sido bombardeada por tropas rusas, lo que ha provocado el incendio de la instalación. Posteriormente, se ha sabido que la situación ha sido controlada y que no ha habido signos de aumento de la radiación en el lugar ya que el incendio «no ha afectado el equipo esencial». Según los informes, la planta tiene seis reactores y tres estaban fuera de servicio antes del ataque. El sólo hecho de que las tropas rusas hayan atacado una instalación de este tipo ha generado fuertes caídas en las bolsas asiáticas, descensos que serán replicados hoy por la mañana cuando abran las bolsas europeas. Este tipo de actuación, totalmente irresponsable, demuestra hasta dónde está dispuesto a llegar Putin y creemos que “cierra la puerta” a una posible solución pactada del conflicto, al menos de momento.
Por lo demás, y con la guerra de Ucrania siempre en la mente de los inversores, destacar que hoy la agenda macroeconómica incluye una cita importante, al publicarse esta tarde en EEUU las cifras de empleo no agrícola y la tasa de desempleo del mes de febrero. Esperamos que ambos datos sean positivos y confirmen que el mercado laboral estadounidense se está volviendo a recuperar tras el parón que experimentó como consecuencia de la última ola de la pandemia, protagonizada por la muy contagiosa pero más benigna variante Ómicron del Covid-19, así como por las medidas restrictivas que fueron implementadas por las autoridades de muchos estados para intentar frenarla.
Para empezar, esperamos que los índices bursátiles europeos abran hoy a la baja, con los bonos, el dólar y el petróleo al alza, ejerciendo de activos refugio. Posteriormente, serán las noticias que lleguen desde Ucrania las que determinen si las bolsas profundizan en sus caídas o recuperan algo de terreno perdido. Habrá, además, que estar muy atentos a la evolución de los futuros de los principales índices de Wall Street, que en las últimas sesiones están siendo utilizados como referentes por los inversores en las principales plazas europeas.
