La OCDE alerta de que el saldo fiscal de España cerrará el presente año en el -3,8% del PIB, una mejora insuficiente de sólo tres décimas del próximo -3,5%

España reconstrucción

Intermoney | España está siendo uno de los países de la UEM que mejor está capeando los vientos en contra derivados de la compleja situación presente, pero nuestro país no es insensible a las subidas ante la brecha de déficit y la subida de la deuda. Ante esto, era interesante la alerta de la OCDE al estimar que el saldo fiscal de España cerrará el presente año en el -3,8% del PIB, considerando insuficiente la mejora de sólo tres décimas del próximo (-3,5%). En nuestro país, la deuda pública es alta, el déficit fiscal sigue siendo excesivo y los gastos relacionados con las pensiones y la salud continuarán en el medio y largo plazo, algo que no le gusta al organismo supranacional.

Para el endeudamiento, la OCDE espera que tras cerrar 2023 con un porcentaje del 109,4% del PIB, este se sitúe en el 110% en 2024. En cuanto a otras cifras, se mejoraba la previsión de crecimiento para este año a 2,5%; aunque se empeoraba para el próximo (1,5% y -0,4 p.p.). Sin embargo, el organismo prevé un crecimiento de la inflación para el ejercicio próximo en España.

Así, los precios pasarían de un aumento del 3,5% en 2023 a uno del 3,7% un año después. En base a esto, la OCDE esgrimía que los ingresos fiscales son bajos según los estándares de la UE y que se debe de mejorar el diseño del sistema tributario, poniendo el enfoque en la base del IVA y las tasas marginales del IRPF. Resulta interesante que el organismo propusiese poner fin a las medidas de apoyo que se implementaron para aliviar el impacto de los altos precios de la energía y los alimentos, ya que no han sido dirigidas en su totalidad a los hogares más vulnerables, e incrementar las ayudas directas destinadas a las familias de menores ingresos.